miércoles, 24 de agosto de 2011

El Año de los Superhéroes.


I. En lo que va del año.


    2011 ha sido un año lleno de grandes estrenos cinematográficos relacionados con las historias donde la fantasía y la ciencia ficción abundan, aparte de los efectos especiales que ya hace rato sobrepasaron la barrera entre lo real y lo verosímil.  De este modo a principios de año tuvimos dos nuevas invasiones alienígenas, con Skyline (la cual no deja de ser una interesante manera de tratar este ya viejo tema, pero esta vez desde el punto de vista del ciudadano común y corriente, que no tiene ni idea de qué es lo que está pasando a su alrededor y no le queda otra que sobrevivir); y, mucho mejor que la anterior, Invasión del Mundo: Batalla Los Ángeles, una verdadera película de guerra donde los militares son los protagonistas.   A su vez el nuevo director de culto, Zack Snyder, estrenó su más reciente película, Sucker Punch (que se me pasó en la cartelera), y Priest, otro filme al que me veré obligado a ver sólo en DVD y el que para ser sincero, no me motivó ir a verla al cine. También pudimos ver la cuarta entrega de una saga que a su manera ha hecho historia: Piratas del Caribe, en Aguas Misteriosas; cine familiar de matinée muy bien hecho y con unas caracterizaciones formidables de parte de sus dos protagonistas (definitivamente creo que Deep y Rush se “roban la película” de nuevo y la Penélope Cruz no está a su altura). También este mismo año hemos tenido la tercera película que adapta el maravilloso mundo de Los Transformers, que si bien es la más débil de la trilogía, no deja de agradecerse una increíble invasión Decepticon con escenas inolvidables y la cuota de humor, acción y aventuras a las que ya nos tiene acostumbrados su director Michael Bay (a quien incluso le perdono su excesivo nacionalismo, en honor a su gusto por la simple y llana entretención, lo que no es malo).   J. J. Abrahams, por su parte, nos deleitó, más bien nos emocionó con su homenaje al Spielberg de los ochenta con Super 8, un filme que demuestra su talento que obviamente sobrepasa en cuanto a profundidad y creatividad al ya mencionado Bay. También llegó con retraso 8 minutos antes de morir (Source Code), que aborda uno de mis temas favoritos, el viaje en el tiempo y que aún no tengo el gusto de ver, así que más allá no puedo referirme a ella.  También dentro de poco se nos viene la esperada nueva película-remacke de El Planeta de los Simios y en el mismo sentido, una nueva de Conan el Bárbaro.  También está por llegar otro filme de ciencia ficción que promete: Cowboys v/s Aliens. De este modo, el fanático de la fantasía y la ciencia ficción puede sentirse más que a gusto con historias de tanta diversidad y que por lo general no carecen de espectacularidad, emociones y adrenalina pura.
      Mención aparte merece la última película de la saga de Harry Potter (Las Reliquias de la Muerte, parte 2) y a la que bien debería hacerle su propia crítica.  Sólo diré por el momento que desde mi humilde opinión, y me considero un seguidor acérrimo de las novelas y las películas, que ésta cierre al ciclo estás más que bien hecha: logra momentos de tal intensidad dramática, que resulta imposible no emocionarse hasta las lágrimas; después de todo, corresponde a personajes y una historia que en mucho casos (como el mío), acompañaron a uno durante más de una década y de verdad se vio una evolución en la trama y el trabajo actoral de sus jóvenes protagonistas, quienes se ganaron más de un elogio.  Se pasó de un cine infantil, a uno mucho más comprometido con los temas abordados y eso creo no haberlo visto antes.
     ¿No se me quedan unas cuantas películas en el tintero? ¡Pues claro que sí! Y ello tiene que ver con el titulo de este texto, puesto que este año, como nunca, aparte de los filmes ya mencionados, se estrenaron nada menos que cuatro películas adaptando populares cómics de superhéroes y cada una con sus propias particularidades (Obvio en este listado El Avispón Verde, pues no lo considero en el sentido más exacto de la palabra a uno de ellos).  Me estoy refiriendo a Thor, X-Men: First Class, Capitán América y Linterna Verde.   De este modo a través de este artículo, lo que deseo es analizar cada una de estas películas, si bien no me referiré mayormente a la última entrega de X-Men, puesto que en este mismo blog ya publiqué en su momento un análisis personal de dicho filme.  Por lo tanto, me referiré en parte a cada filme en específico  y  luego a algunos puntos en común, que he podido apreciar comparten estas cuatro obras.  Las criticas y análisis van según el orden de estreno en Chile.

                             

II. Thor.

    Cuando mitología y superhéroes se combinan, por lo general la mezcla resulta ser maravillosa y la excusa para contar temas épicos a la luz de los ojos de la modernidad con una intensidad admirable.  De este fruto de las historias clásicas, personajes mitológicos sumidos en el mundo actual y reinterpretaciones de las grandes sagas del mundo antiguo, brillan por sí solos la mismísima Mujer Maravilla de DC y en el  manga (cómic japonés), Saint Seiya (conocido en Latinoamérica como Los Caballeros del Zodiaco), por no mencionar muchos casos más.
    Thor resulta ser un personaje que dentro de los personajes del universo Marvel es uno de los más populares.  Puede ser interesante que en nuestro país, Chile, no es uno de los más leídos por quienes gustamos del llamado octavo arte; sin embargo, este nórdico superhéroe tiene un lugar en el corazón para muchos de nosotros.  Me estoy refiriendo a la ya clásica serie de animación de los años sesenta, y que con su técnica casi de viñeta animada, disfrutábamos de niños.   Por otro lado, la mitología no deja de ser atractiva para quienes disfrutan de aventuras maravillosas y fantásticas, puesto que a la larga, como muchos afirman, los cómics forman parte de la mitología del siglo XX y de lo que va del XXI.  Los mitos clásicos mostraban a personajes fabulosos, llenos de virtudes  y que en muchas ocasiones superaban al del común de los mortales, y en el caso preciso del héroe, éste se transformaba en una proyección de la conciencia de una comunidad y de la respuesta de esta conciencia a lo que se entendía como lo mejor de ella misma; de este modo en los tiempos de hoy en día, el superhéroe es en sí mismo la proyección de nuestros ideales más loables. Por la razón anterior los admiramos, seguimos sus historias y deseamos ser como ellos (y parafraseando parte del inolvidable discurso que le da la tía May a Peter Parker, durante la segunda película de Spiderman, nos inspiran).
    Considerando los antecedentes de arriba, era más que obvio que en el último país del mundo, mucha gente fuese al cine a ver Thor, respondiendo con ello a cierta finalidad nostálgica.  Pero hay otros motivos para ver este filme: En primer lugar para el fanático de los cómics y de Marvel específicamente, está el hecho de que cada una de las últimas películas basadas en los personajes de la llamada “Casa de las Ideas” (léase “Marvel”), es en sí un paso más hacia la primera entrega cinematográfica del grupo superheroico de  Los Vengadores (no confundir con la serie de TV inglesa sesentera de la pareja de espías y que tuvo una desastrosa versión hollywoodense a finales de los noventa).  Thor es uno de los componentes de este grupo y junto con Iron Man, Hulk, Capitán América, y otros dos superhéroes menores, vuelve a las pantallas el año que viene. Y en segundo lugar la película es dirigida por el shakesperiano Kenneth Branagh, siendo ésta su tercera película de “género” (luego de las aclamadas Dead Again y Mary Shelley´s Frankenstein).  Era de esperarse entonces un producto bien hecho, considerando además el amor de su director por la mitología germana y luego de tantos filmes premiados e inolvidables.  Dentro de este segundo punto, se sumaba también el hecho de ver actuar nada menos que a Sir Anthony Hopkins haciendo de Odín, el padre del dios-superhéroe.
    Ahora bien, en mi “humilde” opinión, Branagh llegó a la altura  de las expectativas. La película cuenta una historia bien armada, llena de acción y bastantes cuotas de humor, poseyendo además una bellísima dirección de arte en los escenarios mitológicos de Asgard y de la tierra de los Gigantes de Hielo.  Sólo una cosa encuentro ridícula en esta producción: los cómics que inspiraron esta película se basan en la mitología germana, por ende, TODOS sus dioses, héroes y personajes son caucásicos…Si es así ¿Qué diablos hace un dios negro en la película? (Heimdall) No es mi intención hacer un discurso racista aquí, puesto que va contra mis principios, sólo voy a destacar el tema de la verosimilitud en una obra de arte, puesto que algo que realmente me causa risa entre los gringos, es esa noción ambigua en ellos de lo “políticamente correcto”.  Me encanta que haya superhéroes de diversas etnias y tendencias en los cómics, pero otra cosa es caer en el absurdo.
   Como acostumbro en mis críticas, y corresponde a este tipo de textos, no contaré la película aquí, sólo diré que en ella se nos cuenta el origen del personaje y la génesis de su relación con Midgard, la Tierra.  Las actuaciones son muy buenas, y más si se cuenta que aparte de Hopkins, tiene a actores de la talla de Natalie Portman, Rene Russo, Stellan Skarsgård  y Colm Feore.   Mención aparte es el papel protagónico interpretado por un entonces casi desconocido Chris Hemsworth, quien logra hacernos creer que es realmente Thor y a lo largo de la proyección le da el carisma suficiente al personaje, pudiendo sortear entre los momentos épicos y los humorísticos sin dificultad.


III. Capitán América.

     Con Steve Rogers, conocido como Capitán América, en el caso de nuestro país, Chile, sucede algo parecido que con Thor: no es uno de los superhéroes más populares por acá (la verdad es que en cuanto a Marvel, en Chile sólo Spiderman, los 4 Fantásticos y los X-Men son más masivos por estos lares), pero al menos la mayoría de los que tenemos sobre los treinta años recordamos con afecto la serial animada de la misma época de las de Thor, Iron Man, Hulk y Namor.  A su vez este personaje posee cierto elemento detractor a la hora de seguir por acá sus historias: su elemento chovinista, patriótico gringo y proselitista, que quizás no es tan fuerte en los cómics; pero basta con verlo vestido con ese traje que es evidente se encuentra inspirado en la bandera estadounidense y la idea expansionista de USA de llamarse así mismo  “América” (como si el resto no formase parte del continente), para resistirse un poco al personaje.  No obstante Capitán América, tanto el superhéroe como la película, van más allá de este aspecto nacionalista y se agradece que en el caso de un medio más masivo como el cine, la película atendiera más a los valores universalistas que a los meramente localistas y a lo panfletario.
   Algo genial en el filme es el hecho de ambientarla en plena Guerra Mundial, donde como todos sabemos un heroico, pero enclenque Steve Rogers desea defender el bien del dominio nazi.  Es así como gracias a la inventiva de la ciencia, participa en un proyecto para transformarse en un super soldado y luego llega a convertirse en la figura ícono por la libertad, el bien y la justicia entre los suyos.  También el seguidor de las historietas Marvel, sabe que luego de quedar en estado de hibernación, el Capitán América despierta en plena actualidad, enfrentándose a un mundo distinto al que conoció, pero aún así comprometido a seguir su cruzada bienhechora.  Pero lo interesante es la manera de cómo el filme nos cuenta esa primera aventura tan famosa, una puesta en escena genial, que demuestran la preocupación de Marvel  por hacer un producto de calidad (supongo ya están concientes de los dos fiascos de Los 4 Fantásticos, sin mencionar la primera versión risible producida por Roger Corman y que nunca se estrenó).
    Como nos tienen acostumbrados con este tipo de filmes, la producción cuenta con grandes actores entre sus filas: Hugo Weaving como Cráneo Rojo, demuestra que se está transformando en todo un experto en el cine fantástico y de ciencia ficción, siendo ésta su segunda incursión en las adaptaciones de cómics (luego de V de Vendetta).  Da gusto también ver actuar a Toby Jones (para mi gusto, un verdadero hallazgo de talento histriónico) interpretando a un científico nazi (que es plausible no cae en la caricatura maniqueísta) y a Stanley Tucci, que vuelve a salir casi irreconocible; tampoco voy a olvidar a Tommy Lee Jones, quien se redime a los ojos de los fanáticos de los cómics, luego de su sobreactuado trabajo como Dos Caras en esa mal aprovechada película que fue Batman Forever.  Y en cuanto al protagónico, o sea, al papel que desempeña Chris Evans, éste cumple bastante bien su labor y lo mejor de todo es que en ningún momento su personaje se desdibuja y deja de ser el mismo Steve Rogers con su corazón de oro (o sea, ya en su etapa de debilucho, como después del experimento, sigue siendo el mismo hombre de honor y hasta dulce e ingenuo, que es en sí el Capitán América).  Creo en realidad que este joven actor es capaz de dar lo mejor de sí en una buena película y no fue su culpa que su labor como la Antorcha Humana en los fiascos hollywoodenses de Los 4 Fantásticos (¡qué desperdicio de grandes historias y personajes!) haya salido tan mal parada.
   Por cierto, esta no es la primera película que se hace del personaje, siendo que hay cuatro antes de la actual (una de los cuarenta, otra de los setenta y en la que actúa nada menos que Cristopher Lee, otra de los ochenta y la siguiente de los noventa).  Pensaba que sólo la de los ochenta existía, pero la verdad este superhéroe por razones obvias, es muy querido en gringolandia (me encantaría verlas).
   Como sucede con la película de Thor, en Capitán América nuevamente caen en el ridículo de darle protagonismo a un personaje de otra raza de una forma inaudita: me refiero al soldado de origen chino que pelea junto a Steve Rogers y al grupo de comandos que se forma junto a él.  Creo que esto de darle espacio en las películas a otras etnias, podría hacerse mejor si se pensase en una forma más elaborada de introducir el tema de la diversidad, sin caer en ridículo (seguro con lo racistas que son los gringos, en plena Guerra Mundial iban a aceptar entre sus filas a asiáticos, siendo que pelearon contra los japoneses por esas fechas).
   Hay un último punto que deseo destacar de Capitán América y corresponde a sus efectos especiales, específicamente al usado para mostrarnos a un Steve Rogers al que le “faltan más de una cazuela”, figura de alfeñique que contrastará con su apariencia gallarda luego del experimento.  Uno con facilidad puede creer que es otro actor, pero no, es el mismo Cris Evans, quien muestra con su trabajo actoral que no sólo es otra cara bonita; es más, este actor considerado como uno de los más guapos de la industria cinematográfica (fue modelo antes de dedicarse al séptimo arte), sale incluso en el filme  no tan “aminado”, es decir, no explotan su belleza, maquillándolo lo suficiente como para que tenga a lo largo de la película un rostro corriente y destaquen del personaje otros aspectos de su personalidad (bueno, eso sí, no dejan de mostrar la transformación adónica de su cuerpo).


IV. Linterna Verde.

    Quienes me conocen, y además saben de cómics, tienen claro que en cuanto a historietas estadounidenses, soy más bien DC que Marvel (aunque no por ello dejo de disfrutar las historias de la “Casa de las Ideas” , y también de Dark Horse e Image).  Por este motivo, que se estrene una nueva película en los cines, basada en sus personajes, me resulta muy gratificante y más si es sobre mis personajes favoritos (de niño alucinaba con Linterna Verde).  Sin embargo debo admitir que ha medida que fui comprando y leyendo cómics, hoy en día mi Linterna Verde favorito no es Hal Jordan, si no que lo son Guy Gardner y Kyle Rayner (y me gustó que siempre estos dos se llevaran bien, con lo complicado que es el primero de ellos).  Bueno, y cuando ya estuve en el teatro viendo la primera película de imagen real de Linterna Verde, fue algo así como “el sueño del pibe”.
    Es cierto que tan sólo el año antepasado se había hecho una muy buena película animada de Linterna Verde, (Primer Vuelo), y que salió directo al DVD y Blue- Ray.  Ésta se permitió contar a su manera, el origen de Hal Jordan como miembro del cuerpo espacial de vigilantes Linterna Verde.  En este caso, si la comparamos con la película estrenada en los cines, el filme animado fue mucho más ajustado al cómic original del personaje.  Por esta razón, igual hubiese preferido no ver de nuevo el comienzo de Hal Jordan como Linterna Verde, si no que una historia completamente diferente.  No obstante el filme de imagen real fue inteligente en cierto punto y se tomó la libertad de adaptar libremente el cómic, fusionando distintas historias y etapas del personaje.  Por ejemplo, hicieron de Parallax al villano de turno (y no a Siniestro como se esperaba), pero le dieron un origen completamente distinto al conocido por los lectores de cómics.  Puede ser que al seguidor común esto le haya molestado, pero la verdad al pensarlo bien, fue una decisión inteligente si no se quería hacer un calco del filme animado ya mencionado.  Fue grato ver a los Guardianes de Oa bien caracterizados, y a personajes íconos como los Linterna Verde Kilowog, Tomar-Re, Abin Sur y hasta el mismísimo Siniestro, con el agregado sorpresa de la “gran” Amanda Waller (quien en todo caso sale demasiado guapa en el filme, cosa que no lo es en el cómic, ni siquiera en la serie animada de la Liga de la Justicia y en Smalville).   En todo caso, la película logra entretener y emocionar a más de alguno en su butaca…y creo que no veía tanto alienígena estrambótico desde la última trilogía de Star Wars.   Sólo eché de menos algunos Linterna Verde alienígenas más humanoides, como a los que nos muestran en los cómics (a menos que se me hayan escapado a la vista).
    Ryan Reynolds, el actor que interpreta a Hal Jordan, hace rato que estaba listo para interpretar a un personaje de DC (se suponía iba a hacer de Flash, no sé si de Barry Allen o de Wally West); ya había incursionado en las adaptaciones cinematográficas de cómics: en Blade 3 y Wolverine, pero si bien brillaba por su simpatía a la hora de abordar sus personajes, tuvo que esperar un buen resto de tiempo para ponerse por fin el traje de un verdadero superhéroe (que bien en la película no fue hecho con tela, si no que se hizo usando técnicas computacionales sofisticadas).   El Hal Jordan de Ryan Reynolds recuerda más al Kyle Rayner de sus principios, puesto que como él, es un inexperto en lo de ser Linterna Verde y hasta posee la personalidad errática de Guy Gardner.  Sin embargo, Reynolds hace una buena interpretación y logra demostrar una evolución en la psicología de su personaje.

IV. Elementos comunes entre las películas mencionadas.

    Las cuatro películas (y retomo acá a la nueva entrega-precuela de X-Men) tratan sobre la génesis del superhéroe: o sea, qué es lo que lo hace ser tal y cómo se desarrolla su primer trabajo heroico.   De este modo se puede apreciar que:

  • Thor: Su calidad y/o naturaleza de héroe proviene de un derecho de nacimiento divino, puesto que es un dios, si bien en la película hay cierta ambigüedad sobre si Asgard y todo lo que lo conlleva corresponde más bien a una temática de ciencia ficción (civilización extraterrestre u otra dimensión).  En el caso preciso de Thor, éste como el resto de los protagonistas de las otras películas, salvo contadas excepciones a las que ya me referiré, se hace verdaderamente héroe cuando asume su destino, responsabilizándose ante sus actos y de quienes lo rodean y dependen de él.   He aquí que se cumple esa frase cliché tan bonita que hace años el mismísimo Stan Lee acuñó para Spiderman: Un gran poder, implica una gran responsabilidad.  Thor, como el Hal Jordan de la película de Linterna Verde, es un individuo talentoso, valiente, pero hasta cierto punto egoísta y antes de superarse a sí mismo, sólo piensa en pasarla bien; no obstante los vaivenes de la vida lo hacen recapacitar y por eso son capaces ambos de convertirse en personas mejores, en pro de los demás. 
  • X-Men: First Class: Hay que establecer una diferencia entre el Profesor X (Charles Xavier) y sus discípulos.  El primero, el mentor del grupo de mutantes superheroicos, nace como héroe (y en esto se parece más a Steve Rogers, pues la naturaleza de ambos es la de un hombre íntegro que sin dudarlo opta por el bien).  Ello se ve en la película, cuando se le muestra en su infancia ya con atributos virtuosos, considerando que luego aprovecha toda su fortuna e inteligencia en su lucha por el bien.  En cambio sus discípulos mostrados en el filme, si bien se muestran aguerridos en todo momento, lo hacen gracias al modelo y liderazgo benigno de Charles Xavier, superando cada uno de ellos la barrera de los prejuicios sociales para luchar por un ideal de justicia y tolerancia.
  • Capitán América: Tal como ya dije antes, Steve Rogers nace heroico, no se hace.  El personaje va más allá de corresponder a un sentimiento patriótico de emular en un solo individuo lo que supuestamente corresponde a lo mejor de la nación de Estados Unidos (y me recuerda al Tío Sam de DC, al que lo muestran como a la encarnación mística del espíritu de dicho país).  Por lo tanto, tal como se ve en la película, en todo momento Steve Rogers, incluso mucho antes de convertirse en el Capitán América, se comporta con una dignidad indiscutida y un valor loable.
  • Linterna Verde: Para ser un Linterna Verde, se debe ser un buen sujeto y no tener miedo (bueno, salvo en el caso de Kyle Rayner, quien es escogido como Linterna Verde en circunstancias más que diferentes).  De este modo tal como se dice en la película, el anillo vio debajo de esa apariencia superficial de Hal Jordan, a alguien capaz de grandes proezas. Por lo tanto, Hal Jordan es llamado a ser un héroe y si bien le cuesta aceptar que existe dentro de él alguien mucho más valioso que la idea que tiene de si mismo,  al final acepta su destino y se convierte en el hombre que siempre debió ser.

    Joseph Campbell en su libro El Héroe de las Mil Caras propone y analiza a la luz de los grandes mitos y textos épicos de la antigüedad las distintas etapas en el viaje del héroe.  La primera etapa de este recorrido recibe el nombre de llamado a la aventura.  En las películas aquí reseñadas, se puede observar que todos los personajes mencionados arriba reciben su propio llamado a la aventura.  Cada uno la toma con mayor o menor dificultad, dejando de lado la seguridad que puede significar no aceptar este llamado y en el transcurso del viaje, transformándose en individuos muchos más íntegros que al comienzo de su camino.  Con respecto a esto, recalco que aquí sólo Charles Xavier y Steve Rogers comienzan su viaje desde el momento en que nacieron, mientras que el resto debió dejar de lado una vida de comodidad y anonimato, para iniciar otra mucho más complicada, pero legendaria.



6 comentarios:

  1. Interesante, no he visto ninguna de las peliculas pero quizás ahora me animo, no tenía idea sobre la historia del capitán américa y las otras solo las conosco levemente, creo que la que más manejo es x-men ya que me he visto grán parte de la serie de los 90 y actualmente el anime, espero que estos films sean tan agradables como las mencionadas.

    saludos

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  2. Muy bueno el blog! super interesante... vi las peliculas! la mejor hasta ahora Linterna Verde
    Saludos desde Montevideo!
    Marcelo

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  3. es un poco extraño leer algo que puedo escuchar directamente de ti
    pero aun así me parece un blog que puede ser disfrutado por cualquier amante del cine.
    un abrazo desde pañaflor tu ahijado favorito
    perdón por lo tarde del comentario

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  4. jajajaja, me costo, pero lo encontree =D
    relindo tu blog,
    te cobrare la palabra con respecto a rose red!!!!!!!

    un abrazoteee y nos vemos a mi vueltaaaaaa!!!

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  5. texto muy completo a pesar de no dar detalles de la pelicula en si, claro para la gente que aun no la veia en ese tiempoo, lo bueno es que vi cada una deestas, y fueron muy buenas, con decir que la de thor la tengo en dvd original.

    Estamos en una epoca para el cine que todo es mas que posible, debido a los efectos especiales, entre otros factores, ya que gracias a ellos se puede traer a la pantalla grande versiones cinematograficas de nuestros personajes favoritos, este año nos hemos deleitado con 4 peliculas, ghost rider 2 (pelicula que no alcance a ver), marvel the avenger, la cual la vi 2 veces en el cine y me gusto mucho, ya que uno de sus puntos es el trabajo en equipo. La otra peli de marvel fue the amazing spider-man, una pelicula bastante entretenida y con un cambio conceptual en comparacion con la trilogia anterior, cosa que me parecio de muy buen gusto. Y la pelicula que hasta ahora a para mi ha sido la mejor del año, es batman the dark knight rises, cerrando la trilogia dirigida por Nolan de forma magistral de tal forma que en el cine mas de una lagrima te hace derramar la resolucion de la historia, aparte de un reparto y un guion elaborado tomando referencias de varias sagas del mismo comic, y un cierre espectacular, que si uno se pone a verr el encuadre del plaano y el angulo de la camara junto al auidio del momento, te cierra todo el concepto de la pelicula (asciende), aparte de las moralejas que dejan cada una.
    Los heroes nos hacen crecer, son reflejos de nuestras vidas llevados a otros limites, ue nos enseñan como enfrentar el dia a dia, nuestras situaciones, superarnos a nosotros mismos.

    atte. fabian ibarra

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  6. Bueno, Fabián, ahora hay que esperar las 4 pelis nuevas que se nos vienen el año que viene de superhéroes y que como siempre, muestran la supremacía de Marvel por sobre DC en el cine (en otras palabras, son mucho más inteligentes que estos últimos que a lo más se hacen una peli al año) y si no fuera por Marvel, pasarían muchos más entre una y otra.

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