Quienes conocen a Stephen King, incluso
entre quienes nunca lo han leído, saben que en su larga carrera ha escrito un
montón de libros, muchos de ellos llevados al cine, a la televisión e incluso
al cómic…con dispar resultado. Asimismo
la mayor parte de esta gente tiene claro que sus novelas por lo general son
bastante extensas, acusándole muchas veces injustamente de “inflar” a propósito
sus historias para sacar más provecho económico de ello. No obstante lo que dicen estas malas lenguas
se queda en puros prejuicios, cuando se obvia la inmensa cantidad de obras
cortas de este autor, quien escribe de manera periódica entre un volumen más
largo y otro, publicando sus relatos en numerosas revistas y colecciones
prestigiosas, lo que le ha conseguido varias reconocimientos a nivel mundial,
como uno de los grandes cuentistas de la actualidad. Es así que a la fecha desde su ya mítico
recopilatorio El Umbral de la Noche
(1978), King ha dado a sus “lectores constantes” nada menos que 10 tomos de
este tipo hasta la fecha. Pues al creador
de clásicos como Carrie y Salems`Lot le gusta escribir
historias y no solo lo hace por dinero, pues tal como lo demuestran estas
antologías, lo que más le fascina es contarnos una buena narración para
entretenernos, sobrecogernos y no solo aterrarnos, tal como queda demostrado en
el tomo del cual ahora les hablaré.
El Bazar de los Malos Sueños apareció
en el transcurso de 2015, pero recién a comienzos de este año tuvimos el gusto
de que saliera la edición a nuestra
lengua. Mucho más extensa que la
colección que le precedió, Antes del Anochecer, llega casi a
las 600 páginas, que incluyen en esta ocasión no solo cuentos, sino que al
menos 2 novelas cortas y además 2 poemas narrativos en un total de 20 textos. Como es su costumbre desde su segunda
colección de relatos breves (Different Seasson, que los editores
españoles tuvieron la odiosa idea de publicar en dos tomos con nombre diferente
y solo años después lo sacaron “como Dios manda”) el artista comienza el tomo
con una introducción, la que es tan valiosa como sus obras narrativas (que en
cuanto a su lírica, no es muy de mi gusto leer poesía y menos “traducida”, sin
embargo por mucho que me guste el señor King, debo afirmar que me parece que
este formato literario no es su fuerte); además, en este caso el escritor usa
una muy bella metáfora para referirse a su propia actividad como autor de historias de terror: la de un
vendedor nocturno de objetos muy especiales.
De igual manera ante cada historia (y en
ambos poemas), tenemos la suerte de conocer el origen de estas obras, de modo
que través el ejercicio de la memoria que hace su realizador, se nos conceden
varios datos sabrosos de su biografía: recuerdos significativos de su pasado,
juventud y madurez, como también varias anécdotas muy graciosas. En ocasiones
nos llega a sorprender con su propia sinceridad, como cuando sin tapujos se
refiere a su periodo de adicción a las drogas.
Sin embargo antes de todo esto se
encuentra la Nota del Autor, en la que Stephen comienza a dirigirse de manera
directa a sus seguidores, para quienes deja de manifiesto que son estos
escritos. La Nota termina con las
siguientes palabras:
“Hay algo que más que quiero que sepas,
Lector Constante: me alegro mucho de que los dos sigamos aquí. Genial ¿No?”.
y
debo decir que personalmente ello me llegó a lo más hondo, pues de inmediato
sentí como si me lo hubiese dicho a mí mismo, ya que tal como hace unos años
atrás mi autor favorito casi murió tras ser atropellado, yo mismo hace un par
de años estuve a punto de dejar este mundo.
Así que razones hay de sobra para estar agradecido y por eso mismo este
libro es toda una celebración a la vida para su creador, quien todavía sigue
con nosotros dándonos estas inolvidables historias (así como yo me puedo sentir
dichoso por esta nueva oportunidad que se me ha dado).
El libro está conformado por:
1- Área 81: Luego de una obra
tan potente como esta, en la práctica toda una novela corta, el llamado “lector
constante” de Stephen King, quien más encima ha seguido su carrera por años y
ya tiene bastante claro cuáles son las razones de que se le considere el Rey del Terror, queda más que enganchado
a esta última antología suya. Y es que
esta obra es nada menos que un título correspondiente al estilo que tanta fama
le ha dado a su autor, ya que se trata de una historia de terror puro y de un
monstruo más encima (debe saberse que varios de sus mejores relatos de tipo sobrenatural
poseen criaturas horrorosas y mortales, que están entre algunos de sus obras
más destacadas, tales como La Niebla y sus cuentos La
Caja y La Balsa). Por otro
lado, la truculencia y el elemento gore en
general no deja de estar presente aquí. Teniendo
en cuenta esta manera tan soberbia de comenzar la colección fácilmente uno bien
podría creer que el resto del volumen seguirá en general en la misma línea, sin
embargo esto no es así y ello bien puede provocar más de una decepción. En todo caso debe saberse que esta no es la
única narración de este tipo, pero sí destaca entre las demás por sus
características.
Contada a través de capítulos nombrados por
medio del nombre de los personajes y del modelo del auto que estos usan, trata
acerca de una criatura que se “disfraza” de uno de esos vehículos para
conseguir a sus víctimas, las que por supuesto se las come. Todo un acierto resulta ser que la narración
va dando protagonismo a cada uno de los que tienen la mala suerte de cruzarse
con tal ser, llegando sin duda a agradar al lector, para luego sentir verdadera
compasión ante su destino. Pero, por
otro lado, de todos los que se encuentran con este devorador de personas, es en
la figura de nada menos que de 3 niños de distintas edades que la historia se
detiene de manera muy especial, otorgándoles ciertos rasgos heroicos, que aumentan la dosis de
emoción a la obra.
El automóvil como un elemento tan presente
en la vida cotidiana de los seres humanos, que tal cual sucede con las casas
representan en la literatura una metáfora de nuestra misma psiquis y/o cuerpo
(o una extensión de ambos), vuelve acá a aparecer en la narrativa kingniana,
luego de clásicos suyos como Christine y Buick 8. De igual manera el valor que le otorga el
autor a la inocencia y la valentía infantil, nos hace recordar en su conjunto,
al “tío Steve” que muchas veces sus Lectores
Constantes extrañamos de vez en cuando.
2- Premium
Harmony: Un
relato por completo distinto al anterior, que nos trae a un Stephen King ya más
actual y que escribe ahora más que nunca con soltura otro tipo de historias,
aunque nunca perdiendo su capacidad para impactarnos y hasta conmovernos.
Si bien este título se enmarca por
completo dentro de cierto realismo contemporáneo y para nada se acerca al lado
más macabro que le conocemos, sí vuelve a abordar de una manera muy especial
acá un tema que es recurrente en su carrera: la muerte o, mejor dicho, la
manera de cómo nos enfrentamos a la pérdida de un ser querido. Es así que el escritor nos pone a la vista
una vez más al dilema de nuestra mortalidad o más bien de quienes nos importan,
deteniéndose en las reacciones que podemos llegar a tener frente a ello. El dolor, la desesperación y la
irracionalidad que puede llevarnos a sentir algo como esto, están descritos de
manera magistral por este otro King
(no menos valioso que el autor de historias de terror), ya que nos demuestra
qué tan bien conoce como artista el alma de sus semejantes y es capaz de
reflejarlo con tanta humanidad en una ficción como esta.
Al girar la trama en torno a un
matrimonio con problemas conyugales, trata también la dificultad del amor entre
los adultos, pues según queda de manifiesto en este cuento, cuesta mantener el
equilibrio en una empresa como esta.
Sin querer caer en el spoiler,
lo sucedido acá sin dudas que nos remueve, sin tener que caer en el uso de
monstruosidades o psicópatas para ello.
3- Batman y Robin
tienen un altercado: Un
nombre como este no puede ser más llamativo e intrigante, puesto que lo primero
que se le viene a la mente a uno vienen a ser los cómics de famoso Dúo
Dinámico. Debe saberse además que el
mismísimo Caballero de la Noche es el superhéroe favorito de nuestro autor y
quien incluso realizó una bastante recomendable introducción, para la novela
gráfica que a mediados de los ochenta cerró la etapa Pre Crisis del
Murciélago. De igual manera debe tenerse
en cuenta que de seguro DC ni le cobró derechos por usar sus marcas
registradas, gracias a la “publicidad gratuita” que le hizo, lo que en el caso
de alguien menos popular no habría sido así.
Pues su argumento sigue dentro de la línea
más intimista que hayamos en el texto anterior, profundizando a su manera tan
particular en las maravillas y miserias de nuestra sociedad, esta vez acerca de
las relaciones padre-hijo. Es así que
sus protagonistas son un hombre ya maduro (quien rodea la cincuentena de edad)
y su padre anciano con Alzheimer, quienes deben enfrentar juntos la entropía
del paso del tiempo y sin embargo pese a todas las dificultades, se mantiene
por sobre cualquier cosa el fuerte lazo que los une. A su vez, está presente en la narración el tema de la violencia y
cómo esta nos idiotiza, algo que tan bien sabe abordar King.
4- La Duna: Volvemos a la
narrativa de terror y de carácter sobrenatural más encima. Como sucede con el subgénero, trata además
de un misterio y del cual nunca llegamos a saber por qué suceden
acontecimientos como este (tal como en la vida real con el azar), que si su
realizador hubiese concluido todo explicando acerca del origen de las fuerzas
extraordinarias que aquí aparecen, la habría pifiado.
Tal cual sucede en el caso anterior, su
protagonista rememora su vida, que los recuerdos siempre son importantes en las
ficciones para conocer a fondo a los personajes y explicar quiénes son ahora en
su presente, así como en la vida real a través de nuestros recuerdos podemos
mantener la esencia de quienes somos. Esta
vez su protagonista es nada menos que un anciano ya jubilado, un juez más
encima, quien debido a su experiencia profesional y vivencial se supone conoce
bastante bien a sus semejantes, en especial la que concierne a la oscuridad que
guardamos.
Cuando Stephen King está ya dentro de la
llamada “tercera edad”, pareciera que se siente cada vez más identificado con
sus coetáneos, que este anciano no es el único que toma protagonismo en uno de
los cuentos del libro. En todo caso el
examen de conciencia que realiza el protagonista, se equipara en parte al que
realiza el propio King cuando nos cuenta acerca de la génesis de cada uno de
estos relatos.
5- Niño Malo: Sin dudas que uno
de los mejores textos que componen esta antología, tratándose de otra historia
de terror, aunque esta vez más dentro del terreno del psicológico, pese a sus
aspectos sobrenaturales. Asimismo nos
volvemos a encontrar con la presencia de los recuerdos, tan valiosos para darle
un corpus dramático a la ficción y que esta vez nos vuelven a impresionar por
todo lo que se nos cuenta.
Su argumento gira en torno a un hombre que
está por morir con la inyección letal por haber cometido un asesinato a sangre
fría en plena calle, contra un menor de edad y bajo la mirada horrorizada de un
montón de testigos. El sujeto durante
toda su reclusión permanece casi en silencio, incluso con su abogado defensor,
hasta que se encuentra a horas de que se cumpla su sentencia y entonces le
cuenta al leguleyo qué lo llevó a cometer tal acto. Su narración es sin duda impresionante, tanto
para su receptor como para nosotros, ya que en pocas palabras nos revela un
rostro acerca del mal en estado puro inolvidable: bajo la apariencia de un niño
bizarro, que tal como en las narraciones más tradiconales, juega con el engaño
para cobrar sus víctimas. Desde su
infancia el protagonista vive acosado por este verdadero demonio y al que le
debe más de una desgracia en su vida.
Este cuento refleja muy bien lo que la
maldad (y no solo humana) puede llegar a manchar de todo lo bello que hay en el
mundo: la inocencia, la amistad, la esperanza y el amor. A su vez aborda otro tópico importante dentro
de este tipo de obras, el de la justicia, pues tal como se presenta al
principio del relato, una cosa es la idea de justicia que posee una sociedad
civilizada, con sus leyes, tal cual le toca conocer al protagonista en carne
propia debido al crimen que supuestamente ha cometido…Y otra la que tiene que
ver con conceptos más antiguos como la venganza, que ante un relato con estas
características incluso llega a tomar ribetes cercanos a la justicia divina, ya
que el niño malo que aquí aparece sin dudas que es un ser infernal que debe ser
devuelto al agujero de donde salió.
Asimismo como estamos frente a fuerzas desconocidas o mejor dicho de
naturaleza sobrenatural, queda de manifiesto que ni todo el poder o la voluntad
del ser humano, puede contra estas mismas potestades extraterrenas; en otras
palabras, somos poca cosa en comparación con la inmensa vastedad del universo.
No se puede dejar de lado que por medio de
este relato, King regresa a otra temática que maneja bastante bien: el drama
carcelario. Pues si bien esta parte de
la ambientación no es lo primordial en su desarrollo, sí nos hace recordar ese
otro tipo de clásicos suyos como Rita Hayworth y la Redención de Shawshank y La Milla Verde, obras en
las que nos transporta sin dudas a esas claustrofóbicas construcciones y la
verdad de la miseria de quienes se hayan confinados en sus paredes.
Luego de Área 81, sin dudas que de lo mejor en
lo que va de este libro.
6- Una muerte: Sabido por los
lectores más acérrimos del señor King, es que este es un ferviente admirador de
las historias ambientadas en el Lejano Oeste, siendo la mejor prueba de ello
sus novelas de La Torre Oscura. De este
modo el presente texto viene a ser otro de sus homenajes a este escenario que
tanto ama y conoce, demostrándonos su versatilidad para pasar de un estilo a otro
y aun así mantenerse fiel a su pluma.
En esta ocasión vuelve a abordar el viejo
tema de la justicia, que por supuesto tiene que ver con la presencia del mal en
nuestras vidas, aunque a diferencia del cuento que le antecede, este se
presenta a un nivel humano; de igual manera el bien, en esta caso la justicia
humana, se encuentra en una figura constante en las historias gringas y las del
propio King: el representante legal de la ley, que en este caso es nada menos que
un sheriff de pueblo y quien debe hallar al despiadado que mató y violó a una
niña inocente.
7- La iglesia de
huesos: Empezaré
este comentario acerca del primero de los dos poemas agregados a esta
selección, diciéndoles que por mucho que me guste “Esteban Rey”, su lírica me
aburre, puesto que además este género es el que menos me gusta de los tres
grandes de la literatura (cabe recordar que los otros dos son el narrativo y el
dramático, o sea, el teatro); además cuando se lee un poema traducido, se
pierde mucho del original, que a diferencia de otro tipo de textos la lírica
solo se aprecia por completo cuando el lector la aprecia en su lengua materna.
De este poema de carácter narrativo, con
un nombre tan ominoso y que no deja de mantener el característico tono macabro
de buena parte de la obra de King, solo diré que trata sobre un grupo de personas
que hace un viaje por un paisaje, sin dudas que dantesco.
8- La moral: Ahora viene otro
de esos relatos en los que su autor se luce como uno de los mejores narradores
de su generación y de la actualidad.
Pues sin ser una obra de terror, no deja de abarcar los grandes temas
ligados a este género, como lo vienen a ser la oscuridad que anida en el
corazón humano y/o la inclinación natural de las personas al mal (o al pecado,
como podría verse a través de una mirada de tipo religiosa, que el nombre del
cuento atiendo sin dudas a esta dimensión, aunque de manera indirecta).
En cierto sentido esta historia recuerda
a un filme de los noventa que en su momento provocó polémica, Una
Propuesta Indecente, en la que un millonario ya entrado en años le
ofrece a un matrimonio joven una suma increíble de dinero a cambio de acostarse
con la mujer; por supuesto que esta oferta le trae varias consecuencias a la
pareja, que llevan al espectador a más de un debate. Es así que en este cuento, sin vacilaciones
entre lo más destacado del tomo, usa una base parecida, al girar en torno a
marido y mujer que son tentados por un anciano para cometer un “pequeño” acto
de maldad. Una vez cometido el trabajo
por encargo, una serie de situaciones va demostrando lo fácil que se pueden
desmoronar nuestros principios, si accedemos a dejarnos corromper por los
demás.
El atropello cometido por el matrimonio
es sin duda deplorable y se mantiene al lector expectante a saber qué en
realidad se le ha pedido para conseguir su “premio”; sin embargo radica en la
mente retorcida del supuesto hombre de actitud intachable, que podemos
encontrarnos con una exacta imagen de la idea de que nunca llegamos a conocer a
los demás y que cualquiera de nosotros puede albergar los sentimientos más
mezquinos.
La degradación por la que pasa cada uno
de los personajes principales no es para ignorar, que al final nos queda la
certeza de que solo depende de nuestra propia fuerza de voluntad, para mantener
la dignidad frente a lo que llamamos el “pecado”.
9- Más allá: Junto con La
Duna, puede ser considerado dentro de lo menos valorable en este libro
(que por mi falta de “juicio poético”, dejo de lado los dos poemas que aquí se
hayan). La trama posee sus virtudes,
pero la verdad encuentro esta historia una pieza demasiado menor en comparación
con lo mejorcito de su autor.
Tal como dice su nombre, trata acerca de
la vida después de la muerte, por lo que la narración recoge ideas clásicas al
respecto, como ciertas representaciones del purgatorio, la reencarnación y el
mito del eterno retorno.
Su protagonista es un hombre del cual nos
vamos enterando que si bien no es un villano, tampoco es un derroche de
virtudes (quien esté libre de pecados que lance la primera piedra), quien al
fallecer se encuentra en una especie de oficina y tiene una muy interesante
charla con quien lo atiende.
Considerando los elementos de este
relato, su dimensión moral (tan habitual en el género del terror y en autores
con una educación religiosa como Stephen King) nos lleva al terreno de las
consecuencias que tienen nuestros actos en los demás, como en nosotros mismos;
de este modo al igual que en esa joyita que es La Moral (que al lado de
este otro cuento hace que Más Allá pierda frente a tan buen
ejemplo), se nos plantea el papel que cumple el libre albedrío en nuestras
vidas y que no podemos ignorar si en realidad nos importan los demás y deseamos
quedar con la conciencia tranquila.
10- Ur: Debo reconocer que
por mucho que me haya gustado Área 81, este cuento (o novela corta
considerando su extensión) es lejos mi favorito de todo este muy especial Bazar
de los Malos Sueños. ¿La razón?
Pues que en pocas palabras es una historia inserta dentro de la saga que adoro
de Stephen King, conocida como La Torre Oscura, o al menos tiene
estrecha relación con varios de sus elementos: mundos paralelos, la misma Torre…y
los Hampones con Chaqueta Amarilla (esos sujetos monstruosos que ya habían aparecido
anteriormente en otras obras del “tío Steve”).
Su argumento tiene que ver con un profesor
universitario de literatura (otro de los tantos alter ego del propio King),
quien en la práctica toda su vida ha sido un sujeto común y corriente, sin
mayores detalles que lo hagan ser alguien extraordinario. Un día decide comprarse un Kindle, o sea, uno
de esos tantos aparatitos para leer libros en digital. No obstante es por medio de este objeto
propio de la modernidad, que se abre la posibilidad para encontrarse con la
invitación a la aventura que significaría tener un objeto que en realidad no se
trata de un avance de la tecnología (al menos en este caso), sino que se trata
de un artefacto mágico. El Kindle le
permite acceder primero a un listado de obras hechas por los grandes autores de
la literatura (como Shakespeare, Hemingway y mi compatriota Roberto Bolaño,
quien es mencionado dos veces en este relato, lo que no dejó de admirarme), que
no existen en nuestro mundo, aunque sí en otros. Sin embargo todo se complica cuando accede a
una función muy singular de la maquinita, que le permite leer noticias de
nuestro futuro y decide evitar una tragedia a toda costa.
El papel de la literatura en nuestras
vidas queda más que manifestado en este entretenidísimo cuento, como también la
existencia de las maravillas con las que nos podemos encontrar y que si bien
difícilmente serán como este Kindle, sí pueden hacer de la existencia de uno
algo mucho más bello. De igual manera,
tal como le pasa al personaje principal, queda expresado que dentro de cada uno
de nosotros también habita un héroe…Solo hay que aprender a sacarlo a flote.
Preciosa portada...No sé en qué idioma. |
Parece que este es uno de los mejores libros que ha publicado últimamente. Es evidente que King ha madurado como autor. Sus preocupaciones son cada vez más trascendentales.
ResponderEliminarEspero la segunda parte. Un saludo, Elwin.
-Mauro Vargas.
La verdad es que no es mi antología suya favorita (ese papel está entre "El Umbral de la Noche", "Las 4 Estaciones", "Todo es Eventual" y "Todo Oscuro sin Estrellas"), pero de que está bueno el libro, bueno está.
EliminarExcelente análisis Elwin. Espero ansioso la segunda parte. Stephen King es de defender mucho al cuento como forma de expresión literaria. Y es uno de los pocos autores de estos géneros que tanto nos gustan que sigue editando antologías propias. Después... es como todo, según el gusto de cada uno.. habrá relatos buenos, malos y mas ó menos. Pero que siempre es un placer leer al King de los cuentos, no hay duda. Estoy de acuerdo en que El Umbral de la Noche es un antología genial, de lo mejor del género. Pero el King de las novelas cortas que podemos encontrar en Las 4 Estaciones, Todo Oscuro Sin Estrellas y (me permito agregar) Cuatro Después de la Medianoche, es sencillamente impresionante. Un abrazo.
ResponderEliminarRICARDO
www.stephenking.com.ar
Para mí siempre me es una gran dicha compartir estos textos sobre King con otro admirador de su obra (tal cual nuestro compañero Mauro)...
EliminarFíjate que uno de mis "pecados de omisión" que más me pesan, es no haberme comprado "Cuatro Después de la Medianoche" cuando pude hacerlo y a un buen precio. Fue hace años y luego nunca más pillé edición alguna completa. Luego la partición que hicieron de esta obra los editores españoles (un verdadero atentado), nunca la he encontrado en sus dos tomos.
Espero para finales de semana publicar la última parte dedicada a tan maravillosa antología.
Mi estimado amigo,
ResponderEliminartengo este libro bien guardado, en mi lista de lecturas pendientes, como prioridad, jaja. Desde este año me he reconciliado con King, autor al que lei bastante en mi juventud (unas 4 novelas seguidas) y luego abandoné, en mis años en el Pedagógico. Debo confesar que decepciones como la lectura del libro El ciclo del Hombre Lobo, o la penosa película "El Cazador que da Sueño" jaja... me alejaron de él por varios, varios años.
Es hora de reencontrarme con su lectura.
Pues me alegra mucho de que le des una nueva oportunidad, que no tiene por qué gustarte todo lo suyo, además una cosa son las pelis y otra sus textos originales. Yo desde niño que deseo leer "El Ciclo del Hombre Lobo" y solo me lo pude comprar el año pasado, pero aun lo tengo pendiente. Además King ha evolucionado mucho.
EliminarUna cosa no puedo dejar de decir a favor de El ciclo del Hombre Lobo: que tiene unas bellas ilustraciones de Bernie Wrigthson.
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