jueves, 5 de agosto de 2021

Películas olvidadas sobre obras de Stephen King y que merecen ser redescubiertas (III): Dolores Claiborne (1995).

 
1. Antecedentes.
 
     A principios de los 90 Stephen King escribió una trilogía pro-feminista acerca de la violencia a la que se enfrentan las mujeres, cómo esta las marca y cómo logran superarla gracias a su propia fortaleza.  Dicho legado suyo, que nos deja clara su postura humanista y propia de un autor preocupado de los grandes temas, independientemente de sus intereses por lo macabro, está compuesto de las novelas El Retrato de Rose Madder (1995, la única de estas con fuerte contenido sobrenatural y que más encima está ligeramente ligada a su macrosaga de La Torre Oscura, aunque bien se puede decir que lejos es la más débil del conjunto e incluso que llega a estar entre los libros con menos trascendencia de su autor, como Blaze,  Carretera Maldita y La Chica que amaba a Tom Gordon), El Juego de Gerald (1992, una maravilla y hasta cierto punto la más sobresaliente entre estas 3) y del mismo año que la recién nombrada, Dolores Claiborne ...
     Todo un ejercicio narrativo al estar articulado en base al monólogo de su protagonista, sin párrafos entre medio, quien le da nombre al libro, mantiene un interesante lazo con el mencionado volumen anterior.  La historia, en pocas palabras, es la confesión de una mujer madura a la que se le acusa de un asesinato, del cual es en verdad inocente, pero quien sí cometió otro hace décadas atrás, cuyas razones para cometerlas llegamos hasta entenderlas (y justificarlas).  La verdad es que solo leí una vez este texto, que no es muy extenso, ya que con suerte llega a las 300 páginas; así que a la hora de detenerme en su estremecedor argumento, me basaré en la película basada en este título y que me la he visto un montón de veces, porque la adoro y está entre mis favoritas.


2. De qué va la cinta.
 
     Considerando la manera especial con la cual King artículó su relato, bien es sabido que para su adaptación se hicieron importantes cambios, de modo de hacerlo todo más digerible y menos "experimental".  Así que no sé qué tanto- o bien no recuerdo cuánto- modificaron los acontecimientos y a los personajes, como para conseguir esta verdadera joya noventera, que bien merece estar entre lo más granado de los filmes inspirados en la literatura kingniana.
    Ambientada en la misma islita donde luego transcurrirán los eventos de la miniserie La Tormenta del Siglo (otra tremenda creación del escritor, con guión suyo original), nos hace encariñarnos con Dolores Claiborne, quien parece que ha matado a la mujer que estuvo sirviendo hace años en su lujosa mansión.  Es así que tras un largo periodo alejadas, por problemas familiares, su única hija vuelve al hogar para ayudarla a regañadientes,  para arrancar de las manos de un viejo policía y quien lleva tiempo queriendo meterla presa, por otro delito del cual se le acusó y salió impune.   Luego, a medida que va transcurriendo el metraje de casi dos horas y media (que se disfrutan desde principio a fin), vamos dando saltos entre el pasado y el presente, conociendo el drama de Dolores y de su hija en aquel entonces adolescente, víctimas de un espantoso caso de violencia intrafamiliar y abuso sexual.
   "A veces lo único que le queda a una mujer es ser una perra" es el lema de esta pieza que a nadie dejará indiferente y conmoverá por la fuerza de su guión, sin olvidar la perfección a la hora de llevar con un fino arte todo esto, donde dirección, fotografía y la actuación de todos los actores involucrados nos hacen aplaudirla con creces.  Más encima, las palabras aquí mencionadas son una cita textual, que se relaciona con la presencia de un tercer personaje femenino; que mejor descubrirla por uno mismo y quien tras mostrarla primero como alguien indolente, luego la caracterizan con la misma humanidad, con la cual llegamos a encariñarnos con Dolores y su retoño.
 
3. Los temas.
 
    Queda claro el discurso acerca de la emancipación femenina detrás de esta historia; donde, por un lado, está el derecho de toda persona a vivir con libertad e independientemente de su género, como por otro, la representación del machismo capaz de convertir a las féminas en víctimas del egoísmo y los prejuicios del patriarcado.  Frente a esto, es que, por un lado, vemos cómo las mujeres solo se tienen a sí mismas para salir adelante (un evidente ejemplo de resiliencia y/o adaptabilidad en el más duro de los casos) y, por otro, donde los hombres en concreto quedamos "mal parados", por el pésimo ejemplo de al menos 4 miembros de nuestro sexo.
    Luego tenemos el tema de la justicia, puesto que al conocer la situación de Dolores (representante de tantas como ella en el mundo real), nos queda la certeza de que las reglas de la civilización moderna no siempre son las correctas y que hay situaciones en las cuales, las únicas medidas para acabar con el mal es haciendo uso de códigos más arcanos... Un asunto complejo y/o peliagudo, que en más de una ocasión los mismos gringos han abordado con tal capacidad argumentativa (que estamos hablando de un pueblo famoso por sus pecadillos), que nos hace pensar en cómo pese a todo, quedan personas criteriosas entre ellos y que no consideran las cosas como algo de blanco y negro.
    Asimismo, está la idea de qué entendemos por real y verdadero, puesto que nuestros recuerdos, marcados por los mismos sentimientos que tenemos involucrados al respecto y nuestra manera de "pensar el mundo", nos pueden jugar malas pasadas y confundirnos lo suficiente como para vivir engañados... ¡Hasta que se destapa la olla y la verdad ante la existencia de evidencias, nos golpea fuerte en la cara! (luego de ello, ya no hay vuelta atrás).


4. La puesta en escena.
 
   Dirigida por Taylor Hackford, un genial cineasta con un puñado de películas muy interesantes y valoradas por su calidad artísticas (que para cuando realizó esta, aún le quedaban por hacer varias mas bastante buenas, como el filme de terror sobrenatural El Abogado del Diablo), es acompañada en el aspecto artístico- técnico por una fotografía, que le da un toque mágico a ciertas escenas, como cuando sucede frente al espectador el homicidio verdadero homicidio del cual es responsable nuestra heroína trágica.  Por otro lado, no podemos dejar de lado la banda sonora a cargo de Danny Elfman, con una partitura dramática bastante alejada de sus temas corales y grandilocuentes, a los que nos tiene acostumbrados. De igual manera, el maquillaje nos impresiona, cuando tras ver "viejos" a los protagonistas, estos aparecen remozados por una juventud, que juega con la equivocada noción de que todo tiempo pasado fue mejor.
    Pero, pese a todos los elementos que se conjugan para ofrecernos un drama inolvidable, la mayor virtud de esta película radica en los hombros de las actrices y los actores que intervienen en ella.  Empezamos por una grande como lo es Kathy Bates, ya oscarizada por su labor como la asesina psicópata de Misery, también sobre un libro de Stephen King; bien podemos decir que su labor actoral en Dolores Claiborne es superior, que a los espectadores más sensibles les (nos) llega al corazón más que nunca.  A la anterior como Selina adulta, la arisca hija de Dolores, se suma Jennifer Jason Leigh, una actriz joven en aquellos años y que durante los noventa hizo otras grandes cintas, quien no se queda atrás a la veterana que hace de su madre.  Y en el papel principal masculino, el policía obsesionado con llevar a la justicia a Dolores, el tristemente desaparecido Cristopher Plummer; como un hombre que sin ser malvado en realidad, nos hace con facilidad si no odiarlo, sí despreciarlo por su estrechez mental. También otro personaje varón, aunque en este caso correspondiente a un sujeto por completo detestable, viene a ser el que con tanto realismo encarna David Strathairm , un histrión con su propio renombre. De igual manera no podemos olvidar a Judy Parfitt, la actriz que hace de la compleja Vera, el secundario femenino que se "roba la película" con cada una de sus intervenciones.  Por último, cabe destacar a la por entonces joven Ellen Multh , quien hace de Selina en su adolescencia, a John C. Reilly, como un simpático policía que contrasta por completo con su jefe (muchos kilos atrás, je, antes del artista que es hoy en día) y de Bob Gunton, quien junto con la Bates, acá se repite como una nueva incursión más suya en el universo kingniano, luego de su recordado papel como villano en La Redención de Shawshank.
 
5. Por qué es tan importante para mí esta película.
 
     En primer lugar la aprecié mucho antes de tener y leer el libro, apenas se estrenó en cines, que acá llegó con el nombre de Eclipse Total. 
    En aquel tiempo estaba en primer año de la carrera de Castellano en la universidad y había tenido la suerte de conocer a mi "comadrita" Ledda Gaete,  quien me hizo saber que como yo adoraba a Stephen King; fue así que tras haberle prestado Cementerio de Animales, su primer libro de este en leer y que le fascinó, le prometí que apenas se estrenara una nueva película basada en una de sus obras, la iba a invitar; luego, como por arte de magia, al par de semanas siguientes llegó a nuestras salas Dolores Claiborne, fuímos y nos dejó locos de gusto... Fue nuestra primera salida juntos, que luego vinieron muchas más y recuerdo que mi "yunta" luego de ver el filme, me invitó a tomar un rico helado del Tirol, una fuente de soda que hoy en día no existe.  En ese tiempo no contábamos con mucha plata ambos, sin embargo, con poco éramos felices y hoy en día este recuerdo me llena de dicha como siempre.
    Volví a verme varias veces este título, en VHS, luego en DVD y por último en HD, tras descargarla el año pasado y presentársela a unos amigos con los que todas las semanas nos "juntábamos" por Zoom, para comentar un filme que alguien elegía la semana anterior y tras compartirla, la comentábamos a la siguiente reunión.  Aquella vez le encantó mi elección al resto del grupo.  Hoy en día por fin hablo de ella, que lamentablemente no tuvo la repercusión que se merecía, pese a todas las nominaciones y premios que recibió y de ese modo hago lo posible por hacerle justicia con todo mi aprecio a ella.  Ojalá quien no la conozca y lea estas palabras se entusiasme por ella y la aprecie por todo lo valioso que tiene.


                                                                       Tráiler.

6 comentarios:

  1. ¡Peliculón! Otra genial actuación de Kathy Bates, en un registro muy distinto al de Misery, y un elenco de secundarios sobresalientes. Esta película demuestra que se puede adaptar una novela haciéndole muchos cambios y, sin embargo, no traicionar la historia original. El personaje de Jennifer Jason Leigh es un secundario en el libro, y acá casi coprotagonista. Todo en está película está es un lugar, es un drama pero con muchos puntos de terror real. Un film a revalorizar en todos sus sentidos.

    Saludos,
    RICARDO

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    1. Recordaba que Selena no posee la misma dimensión en el libro que en la peli, pero se me fue ponerlo en el post y por ello te lo agradezco. Y en cuanto a este filme, ahora que te escribo se me viene a la memoria que también fue uno de los DVD clonados que me mandaste desde tu patria a principios de los 2000.

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  2. Otra de esas que no he visto, pero que se ve bastante llamativa. Lo más interesante de todo sería ver a Kathy Bates en otra adaptación de King, pero con un personaje totalmente diferente. Sin embargo, lo que me alejaría de ella es la duración. Más de 2 horas lo veo demasiado para una película meramente de drama.

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    1. Ten por seguro que el drama de esta peli y sus actuaciones harán que ese metraje se te haga corto.

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  3. Yo también he visto esta película que tiene un buen reparto, la película es puro drama, a King le gusta explorar cualquier tipo de terror no solo el terror sobrenatural y de monstruos también trata cualquier miedo natural del ser humano, el terror se podría asociar aquí a la violencia de género que desgraciadamente tantas mujeres sufren y muchas con trágicos finales, volviendo a la película destaco la interpretación de Kathy Bates siendo la segunda película que hace sobre una adaptación de Stephen King sin olvidar a Christopher Plummer y Judy Parfitt cuyos personajes son claves en el desarrollo de la historia, Kathy Bates es muy versátil te puede hacer tanto de villana psicópata en Misery como de mujer buena y entrañable en tomates verdes fritos.

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    1. Me alegra mucho saber que este filme también sea de tu agrado... La de "Tomates verdes fritos" la debo volver a ver.

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