viernes, 25 de marzo de 2022

Despidiéndome de William.


 

     Hace casi dos semanas atrás, el 13 de marzo del presente mes, nos dejó William Hurt.  Les estoy hablando de uno de esos actores que, a millones como este servidor, nos acompañó casi toda la vida, por medio de en un montón de películas que atesoramos y que forman parte de nuestros recuerdos del cine, como expresión artística relevante para nosotros; asimismo, más de alguna de las cintas en las que participó, un montón la verdad, se encuentran entre nuestras favoritas.
    De apariencia imponente y muy masculino, encarnó tantos roles diferentes, que era un verdadero camaleón, al punto de hacer tanto de héroe como de villano; su versatilidad le dio hasta para hacer de un homosexual afeminado de manera muy convincente, en una época en la cual el cine gringo aún no se habría con soltura a la comunidad LGTB (1985, El Beso de la Mujer Araña), así como para hacer un papel de mercenario, que en todo el metraje de la producción no emite palabra alguna y solo se comunica con el lenguaje gestual (2006, episodio Campo de Batalla, de la serie de televisión Pesadillas y Alucinaciones).
     Ganador de varios premios debido a su trayectoria y en especial gracias al mentado filme sobre la novela homónima de Manuel Puig, llegó a mi vida cuando yo era apenas un niño y prácticamente todo lo que me veía era en la tele, bastante censurado.  Fue entonces que cuando recién estaba en la primera década de mi existencia, que por la tele y en función nocturna emitieron Estados Alterados (1982), una rara cinta de horror y ciencia ficción que lo más probable en aquella época apenas comprendí y que hace rato tengo pendiente revisitar.  Corresponde esta a la típica historia moralista sobre un científico osado, quien cruza la línea de lo que nos corresponde conocer como simples mortales, teniéndolo de protagonista.  Cabe mencionar que solo estas pasadas vacaciones de verano, gracias a In the Search of the Darkness 2 (2021), documental fabuloso de más de 4 horas de duración sobre las películas de horror ochenteras, tal como su primera parte, pude recordar algo de lo maravillosa que era dicha cinta.


                                                            Tráiler de Estados Alterados

     Eran los tiempos del VHS y de los arriendos en videoclubes de tales cintas, y cuando, además, compraba dos revistas de cine por medio de las cuales acrecentaba mis conocimientos al respecto, que supe de la existencia del filme que le concedió el reconocimiento mundial.  El Beso de la Mujer Araña llegó con retraso a las estanterías a mi país y yo era en aquel entonces un adolescente cinéfilo que veía mucho “cine arte”, aparte de mis amados clase B y “pelis de género”, que estas últimas siempre serán mis predilectas.  Tengo pocos recuerdos de esa celebrada obra, pero sí tengo muy claro que me impactó ver a William Hurt, como esa adorable “loca” que contrastaba tanto con el viril personaje interpretado por Raúl Juliá; ambos reos en una prisión de una dictadura latinoamericana.  Obviamente es el momento de echarle un ojo como adulto.
     Por esa dorada época de temprana juventud, cuando tenía un hambre tremendo por el séptimo arte “de autor”, me interesé por Win Wenders, un cineasta alemán de renombre que hoy en día no acapara mucho mi atención, que digamos. Es así como ambos, cineasta e histrión trabajaron juntos en un raro largometraje de ciencia ficción llamado Hasta el Fin del Mundo (1991).  Solo puedo decir que es sobre un viaje y tecnología avanzada ¿Relacionada con los sueños? Esta sí que no la volvería a ver, ya que hoy en día no me llama la atención el cine muy intelectual.
    Su participación en la versión cinematográfica de La Peste (1992), novela de Albert Camus que me impactó mucho tras leerla para el colegio, fue algo que me dejó con sentimientos encontrados y es que no podía negar el valor de su actuación; sin embargo, la adaptación en sí no logró convencerme, cuando aún siendo demasiado inexperto esperaba que las películas sobre lecturas que tanto disfruté, fuesen iguales a la imagen mental que me hice de tales títulos al tenerlos en mis manos.
    Mejores recuerdos tengo de Dark City (1997), cinta de ciencia ficción de culto y que fui a verla al cine con muy poco conocimiento de ella, salvo que se trataba de una obra maestra.  Acá le tocó hacer de un detective que investiga un caso muy raro y que resulta ser nada menos que la intromisión de una poderosa raza extraterrestre, en la vida de toda una comunidad de humanos.  La verdad es que no recordaba que aparecía en este largometraje que tanto adoro y solo cuando revisé su filmografía, tras enterarme de su fallecimiento, se me vino a la cabeza su imagen dentro de esta historia que se adelantó a Matrix.
     En 1998 acudí al cine muy entusiasmado, a ver la adaptación al cine de un programa televisivo bastante antiguo que seguía de niño, aunque a medida que fui creciendo dejó de interesarme: Perdidos en el Espacio.  La verdad es que se trata de una cinta olvidable, pese a tener a grandes actores aparte del propio William Hurt, entre ellos a Gary Oldman, haciendo este una vez más de sus fascinantes villanos.  Hurt aparecía con barba muy cuidada y se veía estupendo con su traje de cosmonauta, patriarca de la familia protagonista de este revival noventero, que debido a sus malas críticas y fracaso comercial no consiguió convertirse en franquicia.  Un par de años después, para mi Memoria como Profesor de Catellano, confeccioné una edición en VHS sobre imágenes de robots en series y películas; fue así que usé una escena del robot de este filme, como uno de los ejemplos que quise mostrar a mis profesores y es que mi trabajo era sobre los robots en la literatura de Isaac Asimov, cuyas influencias quise presentar en versiones audiovisuales.


                                                      Tráiler de El Beso de la Mujer Araña

     ¿Cómo no iba a formar parte de mi propia historia personal William Hurt, si estuvo tan ligado al cine de ciencia ficción que tanto adoro? Era 2001, cuando estrenaron Inteligencia Artificial, emotiva película del género dirigida por Steven Spielberg, basada en un cuento de Brian Aldiss.  Les hablo de una historia que vez que la veo me hace llorar como una quinceañera y donde nuevamente nuestro desaparecido actor hacía de científico; no es mucho lo que aparece acá, pero resulta sobrecogedora su imagen paternal y a la vez tan solitaria. En verdad ya es hora de volver a disfrutar de tan hermosa obra.
     M. Night Shyamalan es uno de mis directores/guionistas favoritos y La Aldea (2004) es una tremenda producción suya, que hace más de una década tengo pendiente de revisitar por parte mía; fue así que debido a la incipiente reputación de este artista de origen indio, logró reunir en la citada película a un tremendo grupo de actores de renombre: Sigourney Weaver, Adrien Brody, Joaquín Phoenix y la entonces casi principiante Bryce Dallas Howard, quienes acompañaron a William en esta pieza llena de metáforas y moraleja, con otro de esos finales de Shyamalan que nos dejan con la boca abierta. No era una película “cara” y creo que Hurt, como el resto de sus compañeros de reparto, en realidad de puro gusto trabajaron bajo las órdenes de tan grande cineasta; pues teniendo en cuenta la enorme trayectoria del actor, queda claro que no todo lo hizo por simple dinero, ya que laburó en todo tipo de producciones, comerciales e independientes, gringas y de otros países.
     David Cronenberg es otro director que me fascina, aunque sus últimas cintas no las he visto y es que echo de menos su primera etapa como creador de filmes de horror gore y muy sexuales… Pues en Una Historia de Violencia (2004), tremendo título basado en un cómic “para adultos”, posee un pequeño papel como gánster; sin embargo, “se robó la película” y su labor en tan recomendable cinta fue muy alabada.  No recuerdo si la primera vez que aprecié esta joyita fue en el cine o lo hice en DVD; mucho tiempo después tuve la suerte de comprármela en blu-ray, junto a un par más de estupendos largometrajes de suspenso.
     Las últimas cintas para Hollywood que me vi de William Hurt, pertenecen al UCM, así que corresponden a adaptaciones de cómics Marvel, que tantas satisfacciones me han dado.  En ellas llegó a interpretar nada menos que al General Ross, un complejo personaje que es uno de los mayores rivales de Hulk/Bruce Banner y quien, sin ser un verdadero villano, se volvió rápidamente uno de sus mayores motivos de pesar.  Empezando por El Increíble Hulk (2008) y continuando con la estupenda Capitán América: Civil War (2016), también estuvo en las dos últimas cintas de los Vengadores, Infinity War (2018) y Endgame (2019).  El año pasado, para nuestra sorpresa, se repitió el papel con Black Widow, su despedida.  Habría ido genial verlo haciendo de Hulk Rojo, la versión gamma del mismo militar, que tanto odio alberga en su corazón para el buen Goliat Esmeralda y por lo mismo se convirtió en su versión fascista, para pelear puño a puño contra este.
    Cabe mencionar que William Hurt también trabajó para la pantalla chica y de ese modo en 2000, hizo de nada menos que de Leto Atreides, para la adaptación del libro homónimo que hizo la cadena Syfy.  Siendo el actor más famoso de esta producción de bajo presupuesto, su nombre estaba por sobre el resto de los actores principales, siendo que este apenas salía en el primer episodio de los tres que conforman la miniserie.  Para ser sinceros, no fue muy inspirada su participación y dicen que mayormente consiguieron que estuviera en dicho título, porque era un fanático de la saga.
    Si bien hizo varios trabajos más para la pantalla chica, no he contemplado nada más de esta faceta suya y por sobre lo anteriormente mencionado, lejos me quedo con su desempeño en Campo de Batalla, el primer episodio de Pesadillas y Alucinaciones.  Corresponde el mencionado show, a una serie que solo tuvo una temporada y, no obstante, maravillosa, basada en cuentos de Stephen King.  En el caso de este capítulo, que en total se hicieron 8 para el show, Hurt hacía de un despiadado asesino a sueldo y que se enfrentaba a una espantosa venganza de tipo sobrenatural.
   Como se habrán dado cuenta, mucho nos dejó William Hurt y yo no les he hablado ni siquiera de la mitad de su enorme legado… ¡Definitivamente tengo deudas con él!


                                       De regalito para ustedes: Campo de Batalla completito.

6 comentarios:

  1. Yo a este actor lo he visto en la película Hijos de un dios menor donde interpretaba a un hombre que se enamora de una chica sordomuda y por supuesto en el UCM interpretando al suegro de Hulk, descanse en paz.

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    1. Esperaba que un cinéfilo como tú, amigo, se hubiese visto al menos un par de películas más: "Dark City" e 'IA" son títulos que todo ñoño que se precie debe haber disfrutado al menos un par de veces en su vida.

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  2. Tremendo actor, muy versátil. Por supuesto, ha estado en muchos de los géneros que tanto nos gustan, y siempre de la mejor manera. A mi, la actuación que más me conmovió, tal vez porque creo que fue la primera ve que lo vi es en Estados Alterados, película que vi de muy chico y me voló la cabeza.

    Saludos,
    RICARDO

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  3. Hola, Elwin. Me hubiera gusta que hubieras hablado de su primera aparición protagónica en el thriller neo-noir llamado Body Heat (1981), junto a la femme fatale Kathleen Turner. Aun sin haberla visto, es un film sobre el que vale la pena indagar un poco. Una pequeña corrección: Dark City es de 1998 ya que se estrenó el 27 de febrero de ese año, aunque haya sido filmada durante 1997. Esta peli de culto también se considera neo-noir, así que quizás nuestro querido William Hurt tenía gran preferencia por este tipo de filmes.

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    1. Lo que pasa es que no conozco la cinta que mencionas, pero me has dejado entusiasmado. Gracias por la corrección sobre "Dark City", que en todo caso yo me guié por Wikipedia.

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