miércoles, 3 de agosto de 2022

Despedidas varias (II)


     Sigo esta serie de remembranzas dedicadas a artistas que hace poco nos dejaron y a los que tenía pendiente honrar, puesto que llegué a gozar su obra y por lo mismo sus pérdidas las he sentido bastante.
    Por otro lado, justo cuando ya tenía planificado escribir al respecto, otra persona más querida, de quienes no conocí en vida, pero sí llegué a admirar con todo mi ser, se unió a estas nuevas estrellas en el firmamento; sin embargo, en su caso haré un post aparte, que bien amerita algo de esa magnitud, ya que se trata de alguien muy valioso para mí, como podrán darse cuenta dentro de los próximos días.
 
3. Klaus Schulze
 
    Comienzo estas palabras dedicadas al artista alemán experto en música electrónica y que fue uno de los miembros del grupo Tangerine Dream, a principios de los setenta.  Les estoy hablando de alguien, que junto a sus compañeros, fue uno de los pioneros en desarrollar este estilo, convirtiéndolos junto a nombres más populares como Vangelis, Mike Oldfield y Jean Michell Jarre, en una propuesta musical que hoy en día lleva décadas evolucionando y cosechando éxitos.
     Hasta hace unos minutos atrás, tenía muy claro los caminos por los que iba a ir este escrito, puesto que Tangerine Dream me ha acompañado casi toda mi vida y por lo mismo tenia mucho que decir de Schulze; sin embargo, googleando me he enterado que solo grabó el primer disco con esta agrupación y que a lo largo de los años varios integrantes han abandonado el grupo y otros se han incorporado... ¡De modo que hoy en día, sus discos desde hace rato, que no cuentan con el aporte de sus fundadores!
    ¿Entonces qué he escuchado de este compositor, que me lleva a escribir sobre él? Con una carrera discográfica que abarca cientos y cientos de títulos, incluyendo colaboraciones con gente tan reconocida como Lissa Gerrard y Hans Zimmer, a menos que me equivoque, solo he podido conseguir unos 3 discos suyos (gracias a la magia de los Torrent, claro); no obstante, si bien puedo dar fe de que fueron más que de mi agrado, aunque solo puedo recordar uno y que realmente me gustó demasiado: Shadowlands.  Con un nombre como ese (Tierra de Sombras en nuestra lengua), de inmediato acaparó mi atención y bellos recuerdos tengo de este. Compuesto por solo 4 temas, los que duran cerca de 20 minutos cada uno, lo vine a escuchar por primera vez en 2017.  Ese día había llegado a la playa, a Viña del Mar, junto a mi amigo Hans (alemán, más encima) y me senté en la arena a ver el atardecer en la costa; la experiencia fue mágica, que sus composiciones eran maravillosas y acompañadas por el escenario en el que me encontraba, se añadieron a un momento de mi vida que evoco con agradecimiento, dicha y nostalgia.
     Algo de ñoño había en este tremendo artista, que uno de sus discos se llama nada menos que Dune y el último que sacó, nada menos que este año, se titula
Deus Arrakis.  Cabe mencionar que su simpatía con la famosa saga de Frank Herbert, hizo que, además, contribuyera a un disco conceptual orquestado por su colega Hans Zimmer y para quien realizó el año pasado una composición, para una colección de temas inspirados en la película que adaptaba el libro, de la cual Zimmer hizo la banda sonora.  Asimismo, uno de sus temas clásicos se llama... ¡Hyperborea! (solo los frikis de más rancia alcurnia entenderán el valor de esta palabra).
     Por ahora, pretendo descargar más música suya, a ver cómo me va.
    Schulze se fue a componer para el Cielo el 22 de abril, que espero esté acompañado de otros grandes como él.

Portada de uno de sus discos clásicos más famosos.

4. James Caan



 
     De adolescente lo conocí, gracias a que mi cuñado Fabián arrendó en VHS El Padrino, la famosa película basada en la novela homónima de Mario Puzo. Hace rato que le tenía ganas, gracias a los conocimientos de cine que fuí adquiriendo, debido a la revista Cinegrama que llevaba comprando y leyendo hace más de un año.  Era 1991, me encontraba cursando Segundo Medio, con 15 años de edad y quedé  completamente fascinado con el filme, el que se volvió uno de mis favoritos de inmediato (para esa fecha ya había visto MUCHO séptimo arte).  Ahí estaba James Caan, un hombre imponente y hermoso como una criatura de otro mundo, haciendo de Sonny Corleonne, el efusivo hijo mayor del patriarca interpretado por Marlon Brando.  Muchas veces me he vuelto a ver esta cinta y la trilogía completa, que es un gozo repetírsela; hace unos meses no más me reencontré con los Corleone, esta vez con calidad mejor que nunca y por medio de los beneficios del streaming: el guapísimo Caan brillaba más que nunca, formando un memorable triunvirato junto al mentado Brando y al por igual regio Al Pacino.


                                             La escena más famosa de James Caan en El Padrino

    Muchas películas nos legó el actor que ahora (por fin) despedimos.  No contemplé muchas, la verdad, o al menos no recuerdo más que un puñado y que, en todo caso, son significativas para mí.  Más que el caso anterior, me resulta particularmente valiosa y querida la adaptación cinematográfica de Misery, sobre la novela homónima de Stephen King, considerada entre las mejores películas basadas en la obra del Rey del Terror y como una de las piezas sobresalientes del cine noventero.  En esta joyita, un maduro y aun estupendo James Caan interpretaba a Sidney Sheldon, un escritor de novelas rosas con ínfulas de volverse un "autor serio", que es salvado y luego raptado, como también torturado, por su autonombrada "admiradora número 1", una peligrosa psicópata; acompañado por la también ídola Kathy Bates (quien interpretaba a la conmovedora asesina en serie, de una manera magistral, consiguiendo el Oscar por su rol), la dupla de ambos en pantalla se volvió toda una leyenda.
 
                                                               "Si yo muero, tu mueres"
 
    Las palabras anteriores se las dice con una seguridad inquietante, la depredadora a su presa y Caan, como la Bates, hicieron de esa escena un momento de antología en la historia de la cinematografía.
     A menos que me equivoque, supe de este largometraje primero por la revista Fangoria, que venía un genial reportaje al respecto en su mítico número 1 en español.  Luego estuve tentado de comprar el fascículo de la olvidada revista Errol's (una cadena de videoclubes chilena que, en su punto más álgido, tuvo una publicación sobre cine, hasta que fue comprada por la igualmente extinta multinacional Blockbuster), que traía en ese mes como portada el afiche de la película.  Como muchas veces me pasó en aquellos tiempos, me fuí solito al cine a verla apenas la estrenaron y con posterioridad regresé a cada lleno de alegría, gracias a James Caan y compañía.  Era 1992 y ya me encontraba en Tercero Medio, con 16 años todavía.  Muchas veces me repetí este filme, que tanto me gusta (y ya es hora de volver a hacerlo, ahora que la puedo apreciar en HD) y puesto que un amigo muy querido que tuve, me la regaló para un cumple en una linda edición de DVD.
    No hace mucho James Caan y Kathy Bates se juntaron, sacándose una preciosa foto juntos, en la que salen sonriendo y demostrándonos con ello la calidad de los actores, que consiguieron sorprendernos en papeles tan disímiles a la vida real.


                                                             Tráiler subtitulado de Misery

     Otra cinta que puedo mencionar de nuestro actor, que haya saboreado, corresponde a Nación Alien.  Destacable dentro de las grandes cintas de ciencia ficción de los ochenta (aunque desconocida para muchos), resulta ser una más que interesante producción y que ejemplifica de manera correcta, una de las mayores características y virtudes de la fantasía científica: la extrapolación de la realidad, es decir, abordar un tema real, para verlo con ojos críticos al llevarlo a otro contexto, muchas veces exagerando sus connotaciones positivas o negativas.  La trama trata sobre la típica pareja dispareja de policías, que tanto les gusta a los gringos, salvo que en este caso uno de sus integrantes no es humano, sino que un extraterrestre; y es que una raza alienígena ha llegado hasta nuestro mundo, quienes han pedido refugio y de ese modo nuestra sociedad ha tenido que adaptarse a su presencia, lo que han hecho unos mejores que otros.  En el filme, Caan interpreta al terrestre de la dupla, quien representa al hombre común, lleno de prejuicios y que al enfrentarse a la otredad aprende a conocerse a sí mismo, volviéndose mejor persona.   Un filme adelantado para su época, que trata sobre la naturaleza de la violencia, el racismo y la diversidad, donde James Caan nos demuestra una vez más su versatilidad, para encarnar con solvencia roles tan distintos.
    Cabe mencionar que la película anterior, la vi a comienzos de los noventa, de igual manera cuando era un adolescente y un escolar, en VHS y solo la década pasada me la repetí una vez, ahora en DVD clonado; por lo tanto, bien merece una revisión.


                                                              Tráiler de Nación Alien

    Del último filme del que les hablaré, solo recuerdo de su contenido dos cosas: primero que sale en ella James Caan y, segundo, que hacía de gay.  La cinta se llama Los Unos y los Otros y hasta ahí les puedo hablar con hechos, que el resto respecto a ella son solo impresiones.  Gracias a Wikipedia, antes de escribir estas líneas, pude refrescar la memoria, que se trata de una obra francesa de 1981 y que ganó un montón de premios; asimismo, que nos cuenta de cinco familias ligadas a la música a lo largo de cinco décadas, desde los tiempos de la Segunda Guerra Mundial hasta principios de los ochenta. Así que su premisa, como pueden darse cuenta, es preciosa.  Dentro de lo poco que les puedo decir sobre esta pieza, les afirmo que me pareció hermosa y la disfrute mucho; pues, además, estaba muy bien acompañado cuando la vi, ya que ese verano de 2011 estaba saliendo con un tipo, mucho mayor que yo (me sobrepasaba como en 20 años, pero era como el vino, que aparentaba unos cuarenta), quien me habló de tal cinta y en una de nuestras juntas la pillamos en una tienda.  Para un hombre como yo, que encontraba muy atractivo al varonil James Caan, verlo haciendo de gay (que se notaba lo profesional que era, pues no le complicaba el tema, en una época "pretérita" en cierta medida), contemplarlo en tales circunstancias era más que un plus; ahora bien, no recuerdo si salía besándose con otro varón, al menos, que con gusto revisaré esta película para salir de las dudas.
    El 6 de julio del presente año cruzó el umbral al Más Allá, tenía 82 años.


                                                                Tributo a James Caan

6 comentarios:

  1. No conozco el trabajo de Klaus Schulze. Y de James Caan sólo vi El padrino y Misery, ambas películas en las que estuvo fabuloso. Un gran actor, en todo el sentido de la palabra sin ninguna duda. Recuerdo una conversación con mi padre hace muchos años, donde hablando de éste actor, el me decía que tenía toda la pinta de italo-americano, aunque yo creo que se dejaba llevar sólo por su interpretación de Sonny Corleone, ya que Caan no tenía ascendencia italiana, sino judio-aleman.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Siempre tendremos razones de sobra para descubrir y disfrutar los trabajos de estos tremendos artistas

      Eliminar
  2. No conozci tanto la obra de schulze, a pesar de ser un gran fan de la música electrónica alemana de los 70, especialmente Kraftwerk. Me encanta Tangerine Dream, pero Schulze tampoco estuvo mucho por ahi. Asi que este es un buen momento para descubrir algunos de sus trabajos solistas. Con respecto a Caan... Inmenso actor que como la gean mayoría lo recuerdo principalmente por El Padrino y Misery. Es también un buen momento pata redescubrir otras pelis que no he visto, como Alien Nation, pequeño clásico de la ci fi ochentera.

    Saludos,
    Ricardo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me he bajado un montón de discos de Shulze y sus trabajos de los setenta son demasiado experimentales para mí, que luego se pone mas sinfónico; en cuanto a Caan, hay tanto para ver de él, que la deuda es grande.

      Eliminar
  3. No conocía a Klaus Schulze ni su obra, descanse en paz, en cuanto a James Caan como la mayoría solo lo conocía del Padrino y Misery, también lo vi en una serie que se titulaba las Vegas donde trabajaba con la actriz que hacía de Donna en la serie de Twin Peaks y poco más he visto de este gran actor, que descanse en paz.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por el dato, que creo esa serie era muy buena... ¡Igual hay harto para ver de Caan!

      Eliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...