miércoles, 1 de enero de 2014

Todas las cosas buenas…deben acabar.


    La verdad es que he estado bastante dubitativo de si escribir este texto o no, pero al final me decidí hacerlo para continuar con la costumbre que me hice hace dos años con mi blog.
    El 2013 recién pasado comenzó demasiado bien para mí, muy feliz la verdad, siendo el principal motivo que me habían renovado contrato en el colegio donde desde el 2012 había llegado a laburar; además estaba el plus de que iba a continuar trabajando con gran parte del mismo grupo humano en dicho lugar (esto último en realidad era un gran aliciente para mí).
Don José y yo luego de sus clases
de artes marciales en el colegio.
    Desde que los conocí en el 2012, mis colegas y jefes me demostraron una calidad humana como pocas vistas en mi vida como docente, inspirándome con ello a ser mejor profesional y persona en general.  Pero todavía no terminaba el primer semestre, cuando los sostenedores (los dueños del colegio) despidieron de forma bastante fraudulenta al Rector, a don José Alarcón y a quien cariñosamente había llegado a llamar Papi.  Los profesores, los verdaderos artífices del funcionamiento del establecimiento educacional, (luego de lo hecho por don José con su llegada al INTECTUR, otorgándole con su experiencia y sabiduría su actual configuración y que evitó que el colegio se fuera en quiebra, permitiéndole obtener además cierto prestigio), fuimos los últimos en enterarnos de todo y eso que fue casi de forma accidental; esto porque en realidad los villanos sostenedores no nos apreciaban y menos a quienes sabían que le éramos leales al ex Rector.  Luego de que el año anterior fueron injustos con la Sra. Isabel, la antigua Inspectora General y Orientadora, también esposa de don José, fuese “desvinculada” del lugar sin atender a sus logros profesionales, sumado a lo del Rector el año recién pasado, era evidente que para diciembre el panorama para los que seguíamos ahí no sería el mejor.  No obstante siempre mantengo la esperanza de que todo funcionará bien y de que a la larga la justicia prevalecerá (pero el hombre propone y Dios dispone y Sus caminos son misteriosos). Así que estaba equivocado. Durante el 2013 hubo una deserción de docentes bastante grande, puesto que varios en el transcurso de ese tiempo dejaron de trabajar con nosotros por una u otra razón.  Una vez que don José nos dejó, un par de semanas estuvimos funcionando por nosotros mismos, liderados por Patricia, Carolina y Marcela, la Jefa de UTP y las dos coordinadoras respectivamente, quienes a lo largo de todo este periodo hicieron un trabajo divino y sin vacíos.  Pero antes de salir de vacaciones de invierno, regresó Victoria de su postnatal y en vez de tomar su cargo de Orientadora como se suponía, abrazó la dirección, siendo que en una supuesta explicación que me dio a solas me dijo que fue “para que nos sintiéramos tranquilos y no llegara un extraño a tomar el cargo”.  Pues resumiendo, la Victoria que creí conocer y llegué a querer mucho, como decimos en Chile, “se dio vuelta la chaqueta” y se transformó en la marioneta de los sostenedores (verdaderos cínicos o “maricones sonrientes”) y mantuvo con estos una agenda oculta para quienes en vez de eso debía liderar en realidad.  Al final todo el trabajo hecho por cada uno, el compromiso que pudimos demostrar con el colegio no importó, y de todos los profesores que éramos, solo 4 dejaron para este año, todos ellos llegados el 2013 (por lo que no tenían antigüedad) y para ser sinceros, una de ellos no más valía la pena (Geraldine) ….Por lo tanto ahora me encuentro buscando trabajo de nuevo, tras haberme sentido tan a gusto en el Intectur y creer que allí por fin podría obtener la estabilidad profesional ideal.  Así es Chile: acá no saben agradecer lo que en verdad es valioso y en el caso concreto de los colegios, muchas veces lo que permanecen no son los mejores…
El Taller Itinerante celebrando el primer año de vida.
De derecha a izquierda: María Paz, Paulo, Gabriel, Guillermo y yo.
    Pasando a otros temas, nunca faltaron los momentos para agradecerle al Señor la vida concedida y la gente con la cual uno puede compartir: en ese sentido no puedo ser inconciente de que soy muy afortunado.  Dentro de lo que recuerdo al respecto, se encuentra el regalo que me dio mi amigo Paulo Adriazola, al invitarme a formar parte del llamado Taller Itinerante; éste es un “selecto” grupo de personas con los cuales me reúno una vez al mes para comentar, analizar y disfrutar de una breve lectura literaria seleccionada con anticipación (la idea de todo esto, es que cada mes uno de los miembros elija a un narrador y uno de sus escritos, para que todos lo lean antes de las sesiones del grupo; a su vez el encargado de la reunión de ese mes, que se hace en un café o similar, presenta al autor y da datos de interés sobre éste; luego cada uno da su opinión acerca de lo leído).  Este 2014 soy el primero del taller en liderar la charla y escogí nada menos que a Robert Howard, con uno de sus mejores cuentos de su hijo literario más celebrado: Conan el Bárbaro.
    En cuanto a la familia, mi bella sobrina María José, con quien tanto he compartido desde que era un bebé precioso y yo aún era un preadolescente cuando fue su llegada, tuvo su primera guagua: Catalina, una preciosura que me recuerda a la misma Coté cuando la tomábamos en brazos y parecía una muñeca.  Es así como hermana Ani por fin puede sentir el orgullo de ser abuela, lo mismo que su marido; por mi parte espero que este nacimiento les traiga muchas gratificaciones a todos ellos, en especial a mi hermana y quien durante el último tiempo ha tenido sus propias dificultades.  Tengo otra sobrina que fue mamá, Daniela y su hijo se llama Maximiliano, mas siendo sincero, como nunca me he sentido cercano a ella, tampoco me ha llegado a ser significativo este nuevo integrante de la familia por el momento (¿O quieren que les mienta  y haga uso de convencionalismos que siempre me han sido falsos?). 
     
Con la tía Sonia ese bello domingo:
Atrás mi mamá,  a la izquierda la tía y en mis brazos Amilcar.
Continuando con la familia, pero ahora en un plano más dramático, este año mi tía Sonia falleció de cáncer a principios de octubre.  En toda mi vida apenas intimé con ella, pero bien siempre tuve claro de lo amada que era por su gente, siendo la hija mayor de mis abuelos maternos y una persona valiosa por su manera de sobrellevar cada una de las dificultades que le tocó vivir; en este sentido, mi tía Sonia renunció a muchas cosas pensando más en su familia directa, que en sí misma y si bien desde mi punto de vista sus decisiones fueron muy alejadas de lo que espero de una mujer emancipada, tuvo su cuota de heroísmo con todo lo que soportó en su vida de casada.  Sé que mi mamá la quería mucho y el resto de sus hermanas también, por no hablar de su numerosa descendencia.  Mi tía Elsa se vino desde Australia en febrero del año pasado para cuidarla y estar con ella en sus últimos días.  Como no pudo estar cuando mi abuelita Blanca murió, pese a que en más de una ocasión viajó para acá cuando creía que estaba al final del camino que era su vida, sí pudo acompañar a la tía Sonia durante todo este periodo, de una forma tal que me hace admirarla y quererla mucho.  Aún recuerdo con nostalgia poco después de Navidad del 2012, cuando la tía Sonia junto a sus hermanas (menos la tía Elsa que se hallaba en su tierra) nos visitó en mi casa; supuestamente su mal había remitido y en realidad la encontré tan repuesta, con su cabellera renacida tras dejar la quimioterapia, que no dejé de manifestarle lo hermosa que se veía y lo contento que estaba de verla así.  Pero nunca podemos estar por completo seguros de que nuestras expectativas se cumplirán y al par de meses la tía cayó otra vez enferma, de modo que ahora todo fue cuesta abajo.  Dos veces la volví a ver después: primero en el cumpleaños de mi dulce sobrina Anaís, en el cual la pasamos tan bien, durante el mes de mayo, y después un bello domingo de junio en mi casa cuando me encontraba con bota ortopédica y disfrutando de una grata licencia médica (descanso) tras haber sufrido un esguince.  En ambas ocasiones la tía Sonia estuvo acompañada por la tía Elsa.   Después de esa última vez, nunca más estuve en su presencia y tampoco quise verla una vez fallecida (ni siquiera a mi papá lo quise contemplar desde su ataúd, pues prefiero quedarme con la imagen de quienes han partido, lo más llenos de vitalidad posible).   El mundo de los sueños es un gran misterio y el espiritual también…Apenas llegué a mi casa tras asistir al velorio de la tía Sonia, me quedé solo en ella, pues mi mamá prefirió pasar con su hermana esa última noche; mientras dormía, mi tía Sonia me visitó y en el sueño se le veía bastante rejuvenecida, su rostro lleno de color y vida; entonces la abracé y besé muy contento, teniendo siempre claro de que la tía había pasado ya el umbral de la muerte y le dije que me sentía dichoso de contemplarla de esa forma.  Fue un sueño breve, no obstante cuando desperté sentí una honda dicha en mi interior, porque además tuve la certeza de lo afortunado que era de haberla vista de esa manera.  No sé si todo fue fruto de mi deseo, de que  quienes la conocieron mejor que yo dejaran de sufrir por su partida, empero tenía claro de que simple sueño o verdadera experiencia sobrenatural, se me había concedido un preciado don.

     Alguien más nos dejó durante el 2013, días antes de Navidad.  No fue una persona, pero sí otra criatura de Dios y a quien llegamos a querer en la familia.  Su nombre era Cosi, la perrita quiltra que se vino con mi hermano Miguel y los suyos, cuando se instalaron en las dependencias al final del patio de la casa.   Se me viene a la memoria que cuando “la Niña”, como me gustaba llamarle, se vino a vivir acá, la encontraba tan fea que no dejaba de decírselo a la gente, hasta que aprendí a compartir con ella y se ganó mi corazón.  Como perrita mestiza, siempre demostró bastante inteligencia y era muy apegada a nosotros, dejando con gusto que le hicieran cariño en la pancita (con los adultos era así, pues con los niños era celosa y si la molestaban mucho los mordía de inmediato).  Me gustaba sacarme fotos con ella o simplemente tener imágenes suyas a solas, a tal punto que incluso usé una de estas como fondo de pantalla de mi antiguo computador de escritorio.  Durante muchos años ocupaba un rato del día en jugar con Cosi, hasta que nació Amilcar y entonces buena parte de mis afectos los destiné a mi regalón: desde entonces solo a intervalos me iba al patio a saludarla.  Cuando Amilcar se portaba mal, le decía a veces que si seguía así la Cosi le mordería el poto.  Una vez el año pasado, mientras le hacía cariño a la perrita, la miré  a los ojos y me di cuenta que tenía cataratas; no mucho tiempo después le descubrí unas úlceras en la piel.  El día antes de que la hicieran dormir, el mismo Amilcar me contó que Cosi estaba muy enferma y que se cansaba y pasaba cayéndose; a la mañana siguiente mi tía Elsa (quien vino a pasar el resto de su periodo en Chile con nosotros, tras la muerte de la tía Sonia) me dijo que Cosi estaba echada en el suelo y respiraba con dificultad; me fui con ella hasta donde la Niña y mientras le hablaba, la acariciaba; fue entonces que le nombré a Karyn, la hija de mi hermano que tanto la quería de chica y a duras penas levantó la cabecita, atenta a ver si estaba la dueña que la tenía olvidada.  La perrita vomitó algo parecido a la bilis y llamamos a Miguel al celular, quien la llevó a un veterinario para darle paz.  Fue triste para mí, pero no sufrí como sí me habría pasado antes de tener a Amilcar.  A veces me da la impresión de que Cosi sigue acá y pienso en ella como si nunca hubiera muerto.  Estuvo con nosotros más de diez años.
    Amilcar va a tener un hermanito y cuando le pregunto cómo se va a llamar, dice que Peter Parker (¿A quién habrá salido fanático de los superhéroes).  Creo que mi hermana le va a poner Bruno, increíblemente por Bruno Díaz, el nombre civil de Batman en algunas versiones en español.   Sería genial que se llamara así.
     Tengo dos parejas de amigos que también están esperando un bebé.  Primero me enteré que Rodrigo y Angélica serán padres de una niñita, la que estaría naciendo en marzo.  Angélica se ve muy linda con su embarazo, lo mismo que Rosita, quien está embarazada de Marcelo (Brito, que no López, pues el GAIO “le pertenece” a mi comadrita Ledda).  Espero organizarles un entretenido baby shower, eventos que serán la excusa ideal para pasarla bien juntos.
    
Mi tía Elsa y yo
(la foto fue sacada en exclusiva hoy para ser publicada aquí).
Volviendo a mi tía Elsa, como durante estos meses se ha quedado con mi mamá y quien aquí escribe, he pasado más que nunca en su grata compañía.  Hemos visto películas juntos y hasta asistimos al cine para disfrutar En Llamas, una vez que ella misma me convenció de ver Los Juegos del Hambre, basada en el primer libro de esa famosa saga literaria que ha llegado a sobrecogerme (bueno, hasta el momento solo he visto las películas, pero ya pronto me leeré las novelas, ya que me los regaló la tía Elsa para Navidad).  Otras veces comemos cosas ricas juntos, unas veces cocinadas por ella, otras por mí y en muchas ocasiones compradas para la ocasión.  En verdad ha sido genial tenerla en casa, siendo que además de ese modo mi mamá se siente más acompañada y con ella arma sus propios panoramas que las mantiene entretenidas.  Mi tía Elsa es una de las personas más interesantes y agradables que he llegado a conocer.
    Este año mi ahijado Sebastián salió de cuarto medio y hasta el momento pretende estudiar pedagogía en la misma universidad donde su mamá, mi comadrita Ledda, y yo nos conocimos.  Aún recuerdo de forma tan gráfica, cuando era un gordito tan rico y su abnegada madre lo llevaba a la universidad para no dejar sus estudios.  Lo he visto crecer estos 18 años de su existencia, pasando por todas sus etapas, llegando a convertirse en alguien tan pleno a su corta edad.  Sebita tiene una de las sonrisas y risas más cordiales que conozco.  Todos quienes lo queremos esperamos grandes cosas para él.
    Muchas cosas más podría contar acerca del 2013, pero qué tan importantes pueden haber sido dentro de mi existencia…A ver, puedo decir que en materia del blog mismo, desde donde ahora leen estas palabras, no puedo dejar de referirme a las tres nominaciones que recibí desde el extranjero (dos de España y una desde República Dominicana) a premios dados entre blogueros y debido a la labor hecha en mi página.  Estos son el Leibster Award y el One Lovely Blog, de los cuales estoy muy orgulloso; ambos son galardones simbólicos, pero como se dan entre pares, resultan más valiosos que nunca, porque le dicen al bloguero que nuestra tarea posee su impacto y que no es una pérdida de tiempo (por otro lado, el ser humano en general siempre busca la aprobación).
    Bueno, como sale escrito en El Señor de los Anillos, el camino sigue y sigue.  Bien podemos tener idea de lo que vendrá, siendo protagonistas de ello y pudiendo intervenir hasta cierto punto en nuestros destinos, pero la eventualidad (o la mano de Dios) nunca deja de estar presente.
    En realidad tengo fe de que será un buen Año Nuevo 2014.  Que Dios los bendiga a todos.
    
Con Sebita  (esa cara que pone es sólo parte de su carácter histriónico, que bien no corresponde a la sonrisa a la que hago mención acá).

8 comentarios:

  1. No puedo dejar de emocionarme con lo relatado... Recordar a mi Hermana Sonita, y de como dice mi sobrino, llego a mucha gente, entrego mucho amor y soporto mucha carga en su vida, estar con Ella fue un honor. Negrito gracias por mencionarla como parte importa te de tu vida. Debo hacer mencion si de que mi hermanita era la segunda mayor de mi gran familia.

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  2. Gracias, tiíta, por pasarse por acá. La verdad es que bien la tía Sonia se merece todos los honores respectivos. Recuerdo que cuando pequeño, me encantaba ir a su casa (no habían otros niños allá en ese tiempo, pero el ambiente de "campo" era para mí muy gratificante). Besitos.

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  3. Espero que este año entrante sea bueno para ti Elwin, y encuentres trabajo pronto. No sé cómo está el mercado laboral en Chile (ojalá no tan mal como en España) pero te envío ánimos y te deseo mucha suerte. Un abrazo muy grande desde España.

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  4. Gracias, Tomás, por escribir y comentar, mira que ninguno de mis amigos de años que me conocen, han sido capaces de manifestarse por acá (sólo manejan el facebook y las otras redes sociales, así que parece que están acostumbrados "al me gusta" y a poner meras frases que no van más allá del "bonita tu foto" o similares). Te agradezco de corazón tu preocupación y buenos deseos. Te cuento al respecto que en Chile a los profes nos pagan enteros los dos meses de vacaciones de verano (un sueldo por mes) y después nos toca el seguro de cesantía (que en mi caso será un buen monto). No tendría por qué costarme encontrar un nuevo trabajo para marzo, que es cuando comienzan las clases; sólo espero que sea en un buen lugar, como en su tiempo lo fue el INTECTUR hasta que se produjo su "debacle".

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  5. Suerte en todo lo que viene, se lo deseo de todo corazón (Ojalá lea esto)... quizás no hemos llevado muy bien en el 2012 cuando me hizo clases en el 1roG pero sinceramente me conmovió mucho este "Blog" y quiero expresarles mis sinceras disculpas... ud es un buen profesor y debe seguir adelante vena lo que venga... aveces las cosas no son como uno piensa... (se lo digo por lo que pasó en el INTECTUR) cuídese mucho le deseo lo mejor este año, Gracias por todo...

    Andrés Villegas...

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    1. No sabes qué sorpresivo y emotivo ha sido para mí, Andrés, encontrarme con tus palabras acá. En realidad te agradezco mucho todo lo que me dices y tu apreciación. Por supuesto que me acuerdo harto de ti y gracias a los colegas que te hacían clases el año pasado, sé que creciste mucho como persona durante ese tiempo; por otro lado, aún cuando no eras el mejor alumno conmigo, sí siempre tuve claro que eras una buena persona y hoy con este bello gesto tuyo lo corroboro. Para mi es muy importante saber que se valora lo que escribo aquí (imagina que amigos de años, ni siquiera son capaces de darse tiempo para leerme, menos comentarme). Espero que este año sea mejor para ambos...Y por cierto...¿Cómo supiste de este blog?

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  6. ¡Hola! ¡Owww muchas gracias! Ojalá que este año este lleno de suerte y bendiciones para ambos y pueda seguir adelante con mis estudios y llegar ami objetivo y espero que usted también le deseo todas la suerte y siga adelante por que la vida es una sola y hay que disfrutarla al máximo XD. siempre seguí mi concepto de que los amigos realmente no existen y si están es sólo por el momento ellos no estarán cuando uno está mal, me encanta leer y me interesó mucho este "blog" y su relato de su paso por el INTECTUR eso me llevó a visitar este "blog" (que sinceramente está muy bueno) Gracias por responderme sinceramente pensé que no lo haría :) bueno cuídese mucho y muchas gracias por las palabras me sentí super bien al saber que alguien valora las cosas que hago quizás no es mucho pero lo que hago lo hago de corazón (por que me nace) bueno espero verlo algún día Adiós cuídese mucho.... Bendiciones...

    Andrés Villegas

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    1. ¡Somos 2 despiertos hasta tarde! Otra vez gracias por tus bellas palabras y buena voluntad. De antemano estás invitado para cuando quieras a pasarte por acá y dejar tus comentarios también. Que los días que te quedan de vacaciones los disfrutes al máximo.

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