domingo, 16 de febrero de 2020

El retorno de Bill Hodges.


1. Un esperado y prometido regreso.

     En el transcurso de 2014 Stephen King sorprendió gratamente a sus "lectores constantes" (como cariñosamente le gusta llamarnos a sus seguidores incondicionales) con una muy entretenida novela policial, Mr. Mercedes. Ese libro recibió bastantes elogios, debido a cómo logró intrigar al público, creando personajes entrañables y una compleja historia en la que los involucró a ellos y a sus propios lectores. Pero, además, aseguró que se trataba del comienzo de una trilogía, algo en verdad fascinante; puesto que una vez que uno llega a encariñarse con sus héroes, como suele suceder, resulta sencillo desear saber más de quienes se han robado nuestro corazón. Ahora bien, el "Tío Steve" tiene hartos textos y personajes, con quienes reencontrarnos, desde la última vez que supimos de ellos...Algo que en todo caso nos cuenta de vez en cuando, pero ello es con breves apariciones suyas, a manera de "invitados" (como pasó con algunos miembros del "Club de los Perdedores" de It en 22/11/63; lo mismo con Ted Brautigan, de Hampones con Chaquetas Amarillas, que vuelve a aparecer en el último tomo de La Torre Oscura; y, como no, con el Padre Callahan, que se unió al Ka-Tet de Rolando de Gilead y ello en el quinto volumen de la mencionada saga, aunque a este sí que le otorgó calidad de protagonista principal, tras haber sido antes un personaje secundario). En todo caso, debemos recordar al niño prodigio Danny Torrance de El Resplandor, quien más de treinta años después de su debut literario, regresó en la igual formidable Doctor Sueño.
     No obstante, solo con LTO había prometido 7 entregas (que al final nos regaló un par de entregas más), de modo que cuando dijo que Mr. Mercedes era solo el comienzo de una trilogía, había motivos para celebrar; que se trataba de un verdadero acontecimiento ad portas.
     Así fue que mucho más pronto de lo que se esperaba, en 2015, llegó la segunda parte de esta trilogía y ello fue con Quien Pierde Paga (en inglés Finders Keepers, que aparentemente no tiene traducción literal a nuestra lengua, pues corresponde a una expresión coloquial gringa, algo así como "El que se fue a Sevilla, perdió su silla"), que es la novela que nos reúne hoy y cuyo título para los hispanohablantes igual resulta adecuado por los hechos que narra; ya que el nombre original también quiere decir "El que busca, encuentra" y para ser más exactos "Quien lo encuentra, se lo queda"...Algo que ya entenderán por qué razón. 
     En todo caso, el libro se llama así en inglés Finders Keepers, porque la agencia de detective que ahora tiene Bill junto a Holly (dos de los protagonistas del primer texto) lleva ese nombre.


2. De qué trata esta vez.

     Un muchacho recién salido de la adolescencia, lleva años obsesionado con el héroe literario que descubrió aún bastante más joven. El personaje que se ha adueñado de su corazón y pensamientos, Jimmy Gold, aparece en una trilogía, pero el último libro en el que sale la parece una verdadera plasta y toda una traición de su propio autor. Un día se entera del rumor de que el creador de esta novelas, John Rothstein, quien lleva décadas retirado de la vida social y sin publicar, probablemente se haya dedicado todos esos años en solitario en su mansión campesina, a escribir como desenfrenado. Es así que se decide a hacerle una visita, bastante violenta, para comprobar si ello es cierto y a ver si también ha escrito más sobre Gold, que a lo mejor sacó al personaje del desastre de su anterior novela. 
    El encuentro entre uno y otro termina en tragedia y el admirador de Gold escapa, creyendo haber conseguido su sueño cumplido: llevándose consigo un montón de borradores, entre los cuales estaría detallado el regreso de su ídolo. No obstante, décadas pasan como para que Morris Bellany, el villano de esta entrega, logre volver a saber del paradero de su tesoro, el cual escondió en un cofre y enterró, puesto que por décadas estuvo prisionero por otro crimen y del cual apenas tenía memoria. Pero el objeto de su deseo nunca perdió valor en su interior y una vez liberado, sigue aún dispuesto a hacer cualquier cosa para conseguir su objetivo.
    Paralelamente que se nos va contando el devenir de Bellany (ello ahora en el presente), conocemos a Peter Saubers, un chico de solo 13 años y quien por casualidad se encuentra con los bienes preciados del antisocial e incluyendo algo más, que se trajo consigo este cuando realizó su allanamiento. El muchacho le da por años un uso positivo a esta parte del botín, pero cuando ahora busca sacar provecho de los cuadernos, se da cuenta que por muy buenas que sigan siendo sus intenciones, para vender el tesoro que sabe tiene entre sus manos, no es tan fácil...Y es que como era de esperar, ambos destinos están cruzados y ello no conviene especialmente al pobre jovencito. 
     Solo cuando la hermana menor de Peter pide ayuda, para salvarlo de un aprieto que ella solo intuye, aparecen en escena nuestros queridos Bill, Holly y Jeremy para gusto nuestro. Pues King se deleita en caracterizarnos de la manera más completa posible a Bellany y a Peter, quienes son los verdaderos protagonistas de esta novela y al punto de que sin problemas, llegamos a despreciar al "malo", así como sentir simpatía por el buen Peter (incluyendo a su hermana, que no deja de agradarnos); por lo tanto a los ya conocidos Bill y compañía, solo llegamos a "verlos" pasadas las 170 páginas de la edición en español, si bien Jeremy solo aparece muchas páginas después.


3. El amor por la literatura.

     Quienes conocemos bien a nuestro artista, bien sabemos que antes de convertirse en escritor de tiempo completo, fue profesor de literatura (y ello no se deja nunca de serlo, aún cuando ya no se ejerza...se los digo yo que me dedico a este campo). Su incondicionalidad hacia este arte y enorme conocimiento al respecto, han hecho que desde los comienzos de su narrativa sus personajes sean maestros y escritores, muchos de estos títulos algunas de sus obras más destacadas (como las mencionadas más arriba e incluyendo Misery, Un Saco de Huesos y Los Tommyknockers, por solo nombrar otras más); asimismo, nunca deja de mencionar a escritores y a obras que admira, con un manejo de ello que da gusto y entusiasma a sus lectores para conocer por su cuenta tales nombres, entre clásicos y contemporáneos...
     Teniendo en cuenta lo dicho recién, es que nos encontramos con un "nuevo" escritor salido de la imaginación de King, un hombre que si bien sale solo en el primer capítulo del libro, mantiene su poderosa presencia a lo largo de toda esta obra. No cabe duda, para quienes algo sabemos del tema, que el autor lo diseñó basándose en la figura real de J. D. Salinger, un escritor gringo real del siglo XX, que con solo una novela y una colección de cuentos, que le dieron gran fama, elogios y fortuna, dejó de escribir y se recluyó; habiendo siempre la esperanza de que durante su cautiverio, hubiese seguido escribiendo y luego pudiesen hacerse conocidas estas obras. Por lo tanto, a través de este personaje, el Rey del Terror (que ya nos queda claro, también sabe escribir muy bien otro tipo de historias, como esta), ahonda en la psicología de sus colegas, compleja y propia de los artistas que muchas veces resultan ser personas difíciles, con un montón de mañas y no las mejores personas que a veces esperamos, de quienes tanto admiramos (tal como muchos años atrás, nos lo mostró a través de su cuento Dedicatoria).
    A su vez, es evidente el gran homenaje que le hace a esa preciosa novela de aventuras que es La Isla del Tesoro, de Robert Louise Stevenson, libro al que ya le había dedicado un especial lugar en La Tienda de los Deseos Malignos.  Y es que hay varios paralelos entre ambos títulos, partiendo por la presencia de un valeroso joven que se enfrenta a un sujeto violento, quien además se encuentra con un verdadero tesoro guardado en un cofre enterrado y solo gracias  a su ingenio y gallardía logra superar las pruebas que se le ponen por delante.
    Por otro lado, esta obra trata acerca del poder y la influencia que tiene el arte, y en especial la literatura, en el mundo y entre los lectores (incluso hoy en día, cuando las tecnologías audiovisuales han dejado su potente impronta en la sociedad), que para ejemplos reales tenemos el fanatismo que producen obras como El Señor de los Anillos y Harry Potter.
     Pero la imagen que nos muestra sobre esto, tiene dos lados: uno negativo, presentado, por supuesto, a través de la figura de Bellany, un sujeto que se negó a creer en el mundo exterior y en las personas, para convertir a las novelas de Jimmy Gold en su única razón de ser. Pero lo peor de ello, no es que haya optado por hacer de un personaje de ficción su centro, si no que en vez de llevarlo ello a convertirse en mejor persona, queriendo emularlo, dirigió todas sus frustraciones y rencores a una ficción, que más que darle modelos positivos, potenció lo peor de él. En cierto sentido, la obsesión del psicópata se parece mucho a la de los fanáticos por algún equipo deportivo, artista o fantasía; alguien que es incapaz de separar los límites y termina haciendo de su ídolo, un dogma que lo lleva a cometer cualquier atrocidad, cuando se trata de justificar su pasión.
     Pero, por otro lado, está lo que sucede con Peter, un chico que gracias a la literatura no solo llega a encantarse, sino que ello evidentemente lo mueve a valorar este arte no como la única razón de su ser, sino como una muestra de todo lo bello a lo que puede llegar el ser humano. Luego, si comparamos el camino que tomó cada uno de los dos personajes mencionados, y quienes desde muy jóvenes descubrieron el poder de una buena historia, podemos darnos cuenta de cómo las decisiones que uno toma, son tan decisivas para el resto de su vida.

 


 4. Otros aspectos a tener en cuenta en la novela.

     Como ya dije en mi posteo sobre Mr. Mercedes, la primera novela de la trilogía de Bill Hodges, mi personaje favorito es sin dudas Holly. Pues en este segundo libro, contemplamos cómo ha logrado salir adelante del hoyo en el que estuvo por años, siendo un excelente ejemplo de resiliencia, y demostrándonos que un adulto ya con sus buenos años e incluso con problemas psiquiátricos, puede llegar a superar sus taras ...y más todavía si tiene gente que crea en su persona, así como la acepte cómo es, además de darle su amor, algo que sabemos que está mujer de más de cuarenta años ha conseguido de parte de Bill y Jeremy (pues, por lo general cuando se habla de estos temas, solo se mencionan casos de gente joven, especialmente niños y adolescentes, como si el resto del mundo no tuviese la facultad de liberarse de propias ataduras).
    Por otro lado, Stephen King es un hombre de fuertes compromisos morales y sociales desde su juventud, quien en su época universitaria participó de manera activa en las manifestaciones en contra de la Guerra de Vietnam y hoy en día es uno de los mayores opositores públicos y famosos al gobierno de Daniel Trump. De pensamiento ideológico de izquierda y cristiano metodista de formación, a lo largo de su bibliografía podemos hallar estas facetas suyas sin mayores problemas (como su discurso antiabortista en Insomnia, por nombrar solo un caso)...
     Y es luego del preámbulo de arriba, que llegamos al tema de la homosexualidad en la literatura de Stephen King. Pues bien, como artista heterosexual que comenzó a publicar en los sesenta, una época en la que no era habitual tener personajes LGTB de importancia en las historias de ficción, solo puedo recordar que recién en It tuvo personajes gays y eso fue a mediados de los ochenta; uno de ellos fue la primera víctima de Pennywise, tras su regreso en los ochenta y el otro el psicópata adolescente Patrick Hockstetter, quien junto a la pandilla de Henry Bowers, asolaba al Club de los Perdedores en los cincuenta; luego apareció el Muchacho, otro desquiciado que logramos conocer en la versión extendida de Apocalipsis; asimismo, en El Retrato de Rose Madder, en plenos noventa, encontramos un policía desquiciado y al parecer bisexual...Si se dan cuenta, de los mencionados, los tres últimos poseen características negativas y están claramente relacionados con el mal; muchos años después, aparece la compañera lesbiana de , en Mr. Mercedes y quien no es descrita como alguien, de quien quisiéramos ser amigos. Y es cuando llegamos a la novela que ahora nos reúne, donde el segundo villano viene a ser Andy Halliday, un homosexual rastrero, el cual si bien no es asesino como su antiguo amigo de juventud, también se vuelve una pesadilla para Peter. Más encima, el autor lo describe en su ancianidad como alguien físicamente desagradable. Todo esto podría hacernos pensar, que nuestro amado escritor es en realidad alguien homofóbico... ¿Será esto posible? Cabe mencionar que el librero que aparece en Quien Pierde Paga, es sin dudas el personaje LGTB mejor desarrollado de su literatura y ello es caracterizándolo como alguien muy detestable; de modo que queda la interrogante y eso que su única amada hija es lesbiana y está casada con otra mujer...Quizás por esto recién mencionado, solo en La Cúpula aparecen de manera muy breve, una pareja de lesbianas y a las cuales el autor no da rasgos nocivos. La verdad, es que habría que preguntarle directamente al Tío Steve, sobre su verdadero punto de vista al respecto.

5. Evaluación final del libro.

    Personalmente esta segunda entrega de la trilogía no me gustó tanto, que a mi humilde parecer no llega a los extremos de tensión de su predecesora. No es mala, que su trama resulta ser muy original y posee momentos impactantes, en especial en lo que concierne a las fechorías del gran villano de la historia, Stephen King puro; pero, tal como afirmé con anterioridad, uno espera de inmediato la intervención de los héroes y ello ocurre bien entrado el texto, por lo que es fácil que uno se decepcione un poquito.
    Igual para los "lectores constantes" de nuestro autor favorito, resultan ser un agrado los episodios del libro que describen el periodo de Bellany en la cárcel y que nos recuerdan esas otras queridas novelas suyas sobre presidiarios, que son Rita Hayworth y la Redención de Shawshank (que más encima, se menciona su película en la novela) y La Milla Verde.
     Debo dejar claro que aún no leo la tercera parte y final de esta trilogía, Fin de Guardia; no obstante, me da la impresión de que esta segunda parte es una obra de transición, de puente con la última parte y en la que sé King cierra un círculo, al amarrar los elementos que quedaron pendientes en el desenlace de Mr. Mercedes...Y es que el Tío Steve agrega uno de sus famosos epílogos, al muy bien hecho final de Quien Pierde Paga, prometiéndonos un regreso inesperado de un viejo personaje y, además, una cuota inesperada de elementos sobrenaturales como muy bien sabe ocuparlos.

 

2 comentarios:

  1. Una novela extraña, porque es como una "pausa" en la historia de Mr. Mercedes, aunque abre la posibilidad de que este trío de personajes tan geniales puedan tener vida propia más allá de la historia de la primera novela. De todos modos, de forma independiente, es una gran historia, con muchas relaciones a la literatura y los fans, temas ya explorados en Misery, aunque desde otra perspectiva. Saludos!!

    Ricardo

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    Respuestas
    1. En efecto "no hay que mirar a huevo" esta novela, que si bien no llega a la altura de su predecesora, tiene suficientes virtudes como para tenerle aprecio igual. No te voy a negar que estoy muy entusiasmado con la idea de ver su adaptación para la TV, en la tercera y última temporada de "Mr. Mercedes" y más porque trabaja Kate Mulgren, nuestra querida capitana Jenawey para los trekkers.

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