viernes, 5 de diciembre de 2025

A cuatro hombres hermosos... (I)


 

Michael Madsen
 
   Era 1991 cuando se estrenó Thelma & Louise, uno de esos grandes filmes de Ridley Scott, que demuestran su versatilidad para incursionar en distintos géneros y salir tan bien parado.  Yo estaba en el colegio, específicamente en tercero medio, cuando recién se estrenó acá en Chile, pues llegó al año siguiente.  En ese tiempo seguía atento la carrera por los Oscar y dicha cinta venía avalada con varias candidaturas.  Me compraba por aquel periodo al menos dos revistas de cine y me mantenía informado, que mi amor por el séptimo arte estaba acrecentándose cada vez más. Ya sabía quién era su director, gracias a Alien y Blade Runner, dos de mis filmes favoritos desde hace rato, así que solo deseaba ver dicha obra.  No pude ir al cine para disfrutar la susodicha película, pero a penas salió en VHS pedí me la reservaran en el videoclub de mi barrio... Y todo esto para afirmar que entre todo lo que me gustó de ese drama, que me llegó al corazón de una forma que, tal vez, no logré entender a tan temprana edad, se encontraba mi primer encuentro con Michael Madsen.  Allí tenía un corto papel, haciendo del leal compañero y pareja, en lo que yo llamaría ahora una "relación abierta", del personaje de Susan Sarandon, una de las dos protagonistas.  Acá se le veía como un hombre maduro, sabio a su manera, alguien de mucho mundo. Obvio que lo encontré bien atractivo, con ese tipo de belleza masculina que siempre me ha hecho detenerme en la contemplación, a la cual desde ya muy chico deseaba acceder.
   Supongo que deposité mayormente mi atención en él gracias a Species (1995), gran filme de terror y ciencia ficción noventero, sobre una muy particular invasión extraterrestre.  En dicha obra interpretaba a un "especialista" encargado de realizar misiones secretas para el gobierno, especialmente para hallar el rastro de gente nociva al estado y deshacerse de ellos.  Era imposible que su porte varonil y melancólico no me flechara.  Por aquel tiempo, todavía creía iluso que mi destino era con una mujer y fundar con ella una familia; pero igual miraba para el otro lado y entre medio me encontré con él.  Aquella primera vez en el cine, una escena sexy en el cual solo se veían sus piernas desnudas, todo muy sugerente, junto a su osada compañera de cuarto, me provocó mucho morbo.


                                              Michael Madsen en Kill Bill

    Cuando me enteré de su muerte a mitad de año, en homenaje suyo, me volví a ver esta pieza, la cual no revisitaba hace más de una década y seguí sintiendo lo mismo por él.
    De antes del filme de arriba es la opera prima de Quentin Tarantino: Perros de la Calle (1992).  Les estoy hablando de una tremenda historia de acción e intriga, llena de actores de gran calibre, sobre un grupo de asaltantes muy sofisticados; y lo último lo digo por lo elegantes que los vemos en pantalla, todo trajeados y con corbata... Uno de ellos justamente era interpretado por el guapo Michael Madsen.  De todos los tremendos artistas que aparecen en esta cinta, para mí era lejos el que se veía mejor con esa tenida, tan masculino e impecable (claro que su personaje no era el tipo de persona que me atrae, pues estamos hablando de un hombre violento y hasta sádico).
    Mucho tiempo después me lo reencontré en Kill Bill Volúmenes 1 (2003) y 2 (2004), ambas por igual de Tarantino.  Esta vez de nuevo hacia de un sujeto de vida criminal, aunque para ser más preciso de un asesino profesional.  En la primera parte aparece poco y hace un magnífico monólogo, en el cual resaltaban sus bellos ojos de aspecto melancólico, cuando la cámara lo enfocaba en primer ángulo.  Ignoro si era para caracterizar mejor su rol, que se le veía gordo, viejo y descuidado.  En el volumen 2 quedaba en evidencia la crueldad del villano que interpretaba.  
    Creo que no vi más de él con posterioridad, hasta donde yo recuerde.  No recuerdo conocer más de su filmografía, aunque no por ello dejé de evocar su gallarda figura repetidas veces y por eso cuando supe de su deceso, lo lamenté de corazón.  El viril Michael Madsen nos dejó a la edad de 67 años (mucho antes de lo que hoy en día se espera dentro de las actuales expectativas de vida) el 3 de julio de este año.  Me encontraba casi terminando mis vacaciones de invierno y ad portas de cumplir mi medio siglo de existencia; así que la noticia fue como un recordatorio de que este paso por el mundo es efímero, razón por la cual debemos disfrutar al máximo nuestro paso por él, pues de un momento a otro podemos ser llamados para pasar al otro plano.
 
Julian McMahon


 
    Un día antes que el anterior, el 2 de julio del presente año, nos dejó Julian McMahon a loa 56 años (¡Tan joven!), pero lo menciono en segundo lugar, porque a diferencia de Michael lo conocí ya en mi madurez, en el transcurso de la primera década de este siglo.
    Julian era hermoso, un verdadero adonis, pero creo que su atractivo radica más en su sensualidad masculina, que en la impronta salvaje que poseía Madsen... Y a ello se le suma un talento maravilloso para la actuación, que nos dio, al menos lo pienso yo, uno de los personajes más notables de la ficción televisiva: Les estoy hablando del doctor Cristhian Troy, el complejo cirujano plástico de la serie dramática Nip/Tuck (2003-2010) y por la cual no solo obtuvo la verdadera fama, sino que un montón de premios y gracias a ello pude saber de su existencia.  El programa nos mostraba a un arribista cirujano plástico, llevo de taras y sexópata, un hombre que no era malvado, pero a quien sus debilidades lo llevaban a cometer un montón de deslices.  Les estoy hablando no del personaje típico cuya vida me interesa seguir en pantalla, aunque sus cuitas me lograron cautivar, junto a las del resto de los personajes que lo acompañaban, debido a unas historias tremendas y que recuerdo hoy en día con cariño.   Su rol nos mostraba a un sujeto inteligente y muy capaz en su profesión, si bien con una falta tremenda de Inteligencia emocional, dominado por completo por sus bajos impulsos y/o apetitos carnales; al punto de que, en su paso por la vida, había llegado a lastimar a un montón de gente, a veces con premeditación y alevosía, otras sin desearlo.  No obstante, también era un hombre sensible, alguien que podía llegar a amar intensamente y que sentía la necesidad de lograr algún vínculo real y perdurable (el problema era que no sabía cómo mantener este ideal).  Por eso mismo, por su faceta más humana, era que me atraía este Cristhian Troy (bueno y no voy a negar que a ello se le sumaba su enorme sex appeal).  En verdad era impactante verlo tan creíble en todas las gamas de emociones que exhibió frente a la pantalla, en especial cuando estaba atormentado y con una pena tan honda que era conmovedor (y cuando lloraba, uf, ver a un hombre mayor en tal condición estremece y vaya que le salía convincente esto a Julian).
    Pero antes de ganar la verdadera consagración con el drama recién citado, McMahon ya tenía toda una carrera a cuesta, habiendo trabajado en otros shows catódicos y películas (había "escuchado" de Profiler, en la cual también fue uno de sus protagonistas, aunque solo recién ahora la rememoro).  Al respecto, entre 2000 y 2005 actuó en Charmed, un programa con elementos de horror sobrenatural y en el cual lo podernos encontrar en 47 de sus episodios.  Allí hacía de algo así como un mestizo humano-demonio, creo que en un principio como rival de las protagonistas, luego el enamorado de una de ellas.  Me han dicho que destacaba bastante y sobresalía por dicho papel, siempre haciéndose notar su belleza.   Hay tanto para ver y no tengo este programa entre mis opciones, pero me intriga apreciarlo en tal rol.  Cabe mencionar que, a menos que me equivoque, durante ese periodo estaba dedicado tanto a Charmed como a Nip/Rick, algo inusual en una estrella, participando de dos espectáculos televisivos al mismo tiempo.
   Por ser él le perdono su Doctor Doom de pacotilla de los filmes de los 4 Fantásticos de 2005 y 2007, cintas que desprecio con todas mis ganas (bueno, no al nivel de The Batman, que esa sí que me provoca retorcijones y enronchamiento).  Pero no creo haya sido su culpa, que supongo hizo lo que pudo con guiones tan deplorables y una dirección ídem.
   De 2007 data Premonición, un filme de "baja fantasía" que ha sido bastante olvidado.  Es esta producción hacía del marido de Sandra Bullock, el cual muere casi al comienzo de la historia.  Desde ese año que no contemplo esta pieza, de la cual no tengo mucha memoria.
    Y así termino con mis palabras para Julian McMahon, un hombre que tan solo el año pasado, cuando me reencontré con Nip/Rick revivió con mi facilidad mi pasión por él
 
     Dios solo se lleva a los grandes y este año esa certeza ha pesado mucho.


                                             Julian joven y hermoso en Nip/Tuck

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