Después de lo que para muchos sería
uno de los finales de temporada más impactantes y potentes en la historia de
las series de televisión, este año se estrenó con grandes expectativas por
parte del público, la cuarta temporada de un actual hito de la pantalla chica. No obstante cuando todo apuntaba a un debut
igualmente de sorprendente para este nuevo año, de la serie basada en las
novelas de George R. R. Martin, el primer episodio resultó algo lento y sin las
dosis esperadas de espectacularidad a la que bien nos tenía habituados el
programa; sin embargo se podría decir que este capítulo inicial es bien la
antesala de toda la maravilla que más adelante tendría que venir, considerando
además lo que los libros mismos que inspiran la serie, desarrollan sin tapujos
para el lector ávido de emociones fuertes (de este modo no se puede olvidar que
buena parte de los espectadores corresponden a los lectores de dichas novelas,
quienes con más hambre que nunca esperan la traslación a la pantalla, lo más
fidedigna posible, de una de sus sagas favoritas). Por ende, el comienzo de esta cuarta
temporada se puede considerar como el lento, pero progresivo paso a varios de
los momentos claves de la cuarta temporada misma, donde con gran dramatismo sus
responsables demostraron que efectivamente el
invierno se acerca y que todos los
hombres deben morir.
Considerando los factores que implican el origen literario de Juego
de Tronos, como cierta pretensión de respetar lo mejor posible el
material original en el que se basa la serie (sin omitir sus mejores episodios),
sus altos costos de producción, el claro propósito de sacarle provecho
económico a la franquicia televisiva extendiéndola todo lo posible y, en
especial, la preocupación de no quedarse sin material original proveniente de
la pluma de su autor, la temporada anterior adaptó sólo la primera mitad del
tercer libro (cabe mencionar que desde el año 2011 que George R. R. Martin no
saca una nueva novela del ciclo, siendo que hace rato nos tiene prometidos los
tomos 6 y 7; este retraso tiene preocupado a más de seguidor suyo y más todavía
si se considera la mala salud y avanzada edad del escritor). Teniendo en cuenta lo anterior, la temporada
que no hace mucho vio su término, bien resultó todo un ejercicio de reacomodación
de cada una de las subtramas que la componían y que en muchos casos fueron
omitidos el año pasado; es así que se constituyó en la síntesis adecuada a la
hora de dramatizar tanta línea argumental lo mejor posible. Por ende, resulta importante saber que la
cuarta temporada como adaptación vino a ser toda una proeza, ya que poseía
elementos argumentales de los libros 3, 4 y 5 de la saga (esto es Tormenta de Espadas, Festín de Cuervos y Danza de Dragones respectivamente).
La tercera temporada había llegado hasta la mitad del tercer tomo, de
modo que la cuarta prometía pagar la deuda que para los lectores de las novelas
había quedado pendiente. En cuanto a
recompensar a estos, durante el 2014 en gran parte se les pudo complacer; no
obstante el inolvidable epílogo de Tormenta de Espadas aún está sin
poder verse y es de esperar que la introducción de su impresionante personaje
conocido como Corazón de Piedra, por fin pueda concretarse para el año que
viene. En todo caso la dramatización de
los momentos claves de la segunda mitad del tomo mencionado, pudieron verse con
la espectacularidad que por lo general nos tiene acostumbrados la serie y HBO:
esto es la boda de Jofrey, la batalla final contra las huestes del Rey de Más
Allá del Muro, la conquista de la tercera y última ciudad esclavista en el
Oeste a manos de Daenerys, el resto del viaje de Arya junto al Perro y, por
último, el juicio a Tyrion y su espectacular escapada (sin olvidar la de Sansa,
su atormentada esposa). Para quien no haya
leído los libros, cada uno de estos momentos y el resto de los que tenían
relación con los otros dos libros mencionados, no dejaron de causar asombro
(siendo a mi humilde parecer, lejos todo lo relacionado a Tyrion y al Muro, lo
mejor logrado en todo este cuarto año de producción). Al respecto es que, por ejemplo, ante la
decisión de edulcorar la relación sentimental entre Shae y Tyrion, uno se
preguntaba qué tan duros serían a la hora de darle su final a tal hecho, tal y
como en el libro original se desarrollaba… ¡Y justo cuando parecía que los
guionistas optarían por una solución más dulce, el pobre Tyrion terminó con
otra cicatriz emocional en su memoria! (me saco el sombrero por tan valiente
opción). La boda de Jeffrey fue soberbia
y se hizo la justicia que se esperaba (y vaya qué dio gusto ver todo eso). El nuevo paradero que se le dio a Sansa luego
de su huida de Desembarco del Rey, también estuvo desarrollado con maestría, si
bien dicha permanencia en su nuevo hogar pareció repasarse de forma muy
apresurada; no obstante cuando se descubrieron gran parte de las intrigas de su
nuevo protector (con el posterior final de uno de los personajes por entonces
ligados a su reciente destino), resultó difícil no maravillarse ante tanta
revelación. En cuanto a la relación
entre Arya y el Perro, más de una escena entre estos llegó a conmover, en
especial si se considera cómo alguien que en un principio se vio como un ser
detestable, a lo largo de las novelas y de la serie misma se fue humanizando de
forma inesperada (la despedida entre ambos, con varios agregados inteligentes a
su subtrama, resultó sin dudas memorable e invitó a la duda sobre qué pasaba en
realidad en el corazón de la niña Stark, cuando abandonó a su último compañero
de viaje). Con respecto a la gran
batalla en el Muro, ésta fue sin dudas soberbia y manejada con una teatralidad
que atendió al punto de vista de varios de sus protagonistas, sin quitarles su importancia;
de este modo el belicismo de tal momento estuvo a la par de la recordada
invasión malograda de Stannis a Desembarco del Rey en la segunda temporada. Si
antes algunos de los mejores momentos del programa se encontraron centrados en
la figura de la carismática Daenerys y su gente, en este caso sus escenas
quedaron opacadas por las del resto de los coprotagonistas, incluso en lo que
vinieron a ser los agregados propios de la quinta novela (y que para un
servidor eran toda una novedad, ya que aún no me leo Danza de Dragones). Por supuesto que existen otros pasajes del
libro que hasta la finalización de la temporada anterior todavía no se tomaron
en cuenta y que ahora por fin pudieron verse dramatizados: como bien sucedió
con todo lo concerniente a la gente de Rocadragón, así como con otras líneas
argumentales propias de la familia de los Lannister (y al respecto no se puede desmerecer la dignificación por la que pasa Jaime, otro personaje que con el tiempo adquirió gran honor); no obstante la
espectacularidad de las otras subtramas, les ganó en acaparar la atención de
gran parte del público.
Teniendo en cuenta los tres libros de los que se nutrió la última
temporada, en lo que respecta a los acontecimientos del cuarto libro, todo lo
concerniente al viaje de la heroica Brienne junto a Podrick, estuvo sacado en
parte de esta novela; no obstante dicho periplo en la serie otorgó además
varias sorpresas gratificantes y que un lector de los tomos no se esperaba, más
todavía considerando uno que otro encuentro con un personaje clave de la serie. También parte de la estancia de Sansa en Nido
de Águilas fue retratada en este caso. Terminando
con lo propio de Festín de Cuervos, no se puede olvidar que a partir de este año
comenzó a desarrollarse lo respectivo a los planes de Margaery Tyrell, para
“conquistar” un tercer rey tras sus dos anteriores fracasos.
La Doncella de Tarth y su fiel escudero. |
En cuanto a lo que corresponde al quinto libro de Canción de Hielo, el programa
se centró en todo lo que tenía relación con el gobierno de Daenerys, de las tres
ciudades que había conquistado y las nuevas vicisitudes que le trajeron sus
recientes responsabilidades (destacando los conflictos provocados por sus
queridísimos dragones). No obstante fue la
propia odisea de Bran junto a sus protectores, lo más sorprendente de la
temporada que adaptó en parte esta última novela publicada (en especial hacia
el final de esta misma y todo tan lleno de magia).
Dentro de los agregados propios de la serie a la continuidad televisiva
de Juego
de Tronos, no dejó de ser todo un acierto las escenas centradas en
Theon Greyjoy y el que al menos hasta Festín de Cuervos se suponía muerto
tras su fracaso de dominar Invernalia.
Es así que en la serie no se quiso desaprovechar a este personaje y se
le otorgó un destino tan terrible a partir de la tercera temporada, que su
traición a los Stark bien pareciera haber sido castigada con más severidad y
morbosidad de lo que alguien “civilizado” pensaría. El cambio por el que hasta el momento ha pasado
el heredero de Balon, de ser un hombre orgulloso a convertirse en un alfeñique,
no deja de impactar y en ese sentido resulta difícil no tenerle lástima. Ligado a la patética nueva vida de Theon, se
encuentra la de su atormentador, Ramsay Nieve, uno de esos sujetos tan
retorcidos que brillan por su propia malevolencia en la saga, ya sea en su
formato original (novelas), como televisiva; es así que el llamado Bastardo de
Bolton, quien apenas se menciona en los libros, en el programa se encontró
caracterizado de forma brillante, a tal punto que no dejó impávido a nadie en
sus pocas, pero potentes intervenciones en el show. Otro gran aporte en el programa durante este
2014, fue el hecho de adelantarnos la introducción de una nueva y exótica
ciudad propia del mundo de Canción de Hielo y Fuego: la
metrópolis costera de Braavos; ésta a partir del cuarto tomo logró gran
relevancia, pero ya en esta cuarta temporada fue posible vislumbrar su
majestuosidad, sobresaliendo la gran estatua que da la bienvenida a quienes
ingresan en ella y que ya en el bello opening
de la serie es posible apreciar. Existe
una inolvidable escena, también hacia finales de la sesión, en la cual fue
posible ver a los aterradores Otros en una faceta suya hasta hace poco desconocida
y que promete inolvidables sorpresas para más adelante con estas misteriosas
criaturas.
Otro personaje al que cabe destacar, de quien apenas se supo a dónde fue
a parar tras los eventos de Tormenta de Espadas y que ni
siquiera apareció en Festín de Cuervos viene a ser Lord
Varys. Este sujeto de personalidad
ambivalente, si bien nunca cruel, a lo largo de la serie ha sido retratado con
una humanidad que le otorga simpatía para muchos espectadores; en ello llama la
atención la soledad de su cargo y de su particular circunstancia (recordemos
que es un eunuco, siendo además un sujeto muy inteligente, astuto y bastante
andrógeno), al que pareciera que los guionistas le han tomado especial cariño. Su especial personalidad lo lleva a equiparse
en varios aspectos con alguien como Tyrion; ello tanto debido al carácter de
parias de ambos, como a sus grandes dotes de raciocinio que en muchos casos los
hacen encumbrarse sobre quienes los desprecian; a su vez ambos sujetos poseen
un especial sentido del honor que los hace “queribles”. (algo de lo cual carece,
por ejemplo, otro individuo igualmente sagaz, como lo es Meñique). Quizás es por todo lo anterior que en el
desenlace de la temporada, tomándose nuevas libertades respecto a los libros
que inspiran la serie, el destino entre ambos se unió más todavía, augurando
nuevas aventuras juntos. En todo caso
no se puede olvidar el trabajo histriónico del actor a cargo del personaje,
quien le otorga una inolvidable sensibilidad al personaje a su cargo.
Por último, considerando que en lo que va del estreno de esta
multipremiada producción televisiva ya han pasado cuatro años, el paso del
tiempo se hace notar en sus otrora actores infantiles, lo que en este caso se
refiere a los responsables de los hermanos Arya y Bran (queda la duda de si
quien aparece interpretando a Tonmen, es la misma persona que fugazmente se vio
en las temporadas anteriores, ya que bastante distinto está respecto a sus
primeras apariciones). De este modo todos
ellos han crecido bastante, en especial Bran, por lo que bien uno puede esperar que
para los años que están por venir, el cambio será aún mucho más radical. Ante este proceso natural del desarrollo de los
pequeños, tendría que explicarse todo ello en las siguientes temporadas, convirtiendo
los meses en años para el tiempo ficticio del programa. No obstante habrá que
ver lo que nos depara el futuro, con respecto a estos jóvenes talentos y su
apariencia.
Daenerys de la Tormenta junto a uno de sus ya creciditos dragones. |
Hola Elwin! No te imaginas qué admiración me causa que puedas contar tanto sin soltar spoilers, jajaja! Yo soy totalmente incapaz, como ya lo has descubierto en carne propia, ja...
ResponderEliminarCon respecto del actor que interpreta a Tommen, hasta donde me enteré hubo recast: pusieron en ese puesto a uno de quienes interpretaron a los pequeños Lannister que Lord Karstark matara en temporadas anteriores. Dicen que para no hacer tan chocante la relación con Margaery...
Yo tuve una relación completamente ambigua con la temporada. Hubo cosas que amé, y cuestiones que encontré detestables. Tú dices que dignificaron a Jaime, y a mí no se me va de la cabeza la escena del septo... escena mal filmada y mal dirigida si las hay, que debió salir el director a explicar "qué había querido decir" después de emitido el capítulo. Que si fue violación, que si no lo fue... era tan confusa la escena que en un principio me dejó con la duda. Pero claro, es que yo venía con la escena del libro, donde claramente no lo es. Pero acá sale el director a decir que sí lo fue... Y tanto Nik como Lena embarran aún más la cancha, con declaraciones confusas. En fin, para mí nada volvió a ser lo mismo en el arco de Jaime después de ese malhadado capítulo tres.
Ah, Varys, cómo lo quiero al pelado ese... siempre digo lo mismo, él actúa en su propio beneficio pero también guiado por el bienestar general. Eso es lo que lo distancia, a mi modo de ver, de tipos como Baelish...
¿Has leído ese rumor que circula, según el cual no va a haber Lady Stoneheart para la serie? Me da un ataque...
Hay algunos "encuentros" en la trama de Brienne que me pareció no tenían demasiado sentido, pero en fin... dieron lugar a escenas memorables, así que todo perdonado.
El capítulo de la batalla por el Muro, en retrospectiva, me gustó... en el momento me desilusioné porque yo esperaba ver llegar la caballería de Stannis en ese mismo episodio... el corte me resultó bastante anticlimático, pero en fin...
Como todavía te falta leer Danza, no te voy a decir demasiado, pero Ramsay es DESPRECIABLE, mucho peor que este loquito vistoso y hasta querible que nos han querido vender en la serie. Sí, ya sé que el Ramsay de Iwan es tremebundo... pero el literario es terrorífico, sin nada en absoluto que lo pueda redimir.
Como ya dije por allá... yo quería un Emmy para Alfie Allen! (Y que Walda hiciera algo más que decir "hola" y sonreir asustada...)
Muchas gracias por pasarte por acá, Guivi, que entre fangirl y fanboy nos entendemos. Qué interesante todo lo que me dices, entre ello lo de la "escandalosa" escena en el septo entre los hermanitos Lannister; pues bien, ésta corresponde a la adaptación de una que ocurría apenas llegaba Jaime a Desembarco del Rey junto a nuestra queridísima Brienne y que sucede en el libro 3; de este modo no me sorprendió, pues más que una violación, responde a la personalidad errática de ambos personajes. En cuanto a esos rumores de que no habrá Corazón de Piedra...¡Así los pille Nyarlathothep! Realmente sería un gran error quitar a ese gran personaje de la trama (además queremos volver a ver a la actriz, quien hace rato ya se robó nuestro corazón y admiración). No sé si aguante hasta fin de año sin leerme "Danza de Dragones".
EliminarAh, si tienes el libro disponible no sé cómo vas a hacer para no leerlo, jaja! Qué disciplina estupenda!
EliminarEl tema con el septo, creo, es que la escena les salió mal. En el libro es recontra polémica, por el momento en que se da, pero también tiene muchísimo sentido a ser el "reencuentro". En la serie le quitaron eso al adelantar la llegada del "muchacho encantador". Por otro lado, en el libro es claro el común acuerdo entre los personajes... pero en la serie Cersei se la pasa diciendo "por favor, no... por favor, no", y no encontré nada en su lenguaje corporal que me expresara lo contrario. Eso fue maltratar al personaje de Jaime porque, vamos, se lo puede acusar prácticamente de cualquier cosa menos de abusador de mujeres...
Y sí, más les vale que nos traigan a Corazón de Piedra... aunque muchos dicen que es un lío contratar a Michelle por un par de caps, y blah blah blah... pero yo no quiero perder las esperanzas.
¿Y cómo te ha parecido que trataban el rol de Brienne? Mucho opinaron que la habían hecho excesivamente agresiva...
El libro aún no me lo compro, pues apenas me termine la pequeña joyita que me ocupa parte de mi tiempo libre, me están esperando otras dos inmensas novelas de fantasía y que me regalaron por mi cumple (de Brandon Sanderson, un autor que te recomiendo sin dudarlo),;así que para fin de año a más tardar lo estaría adquiriendo. Respecto a las constantes negaciones de Cersei durante la famosa escena, no puedo dejar de considerar lo retorcido de su personalidad, por lo que dudo de una verdadera negación de su parte (en todo caso, rechazo todo tipo de violencia contra la mujer, en especial la violación). En cuanto a Brienne (una de mis favoritas), creo que su versión televisiva le hace el honor que le corresponde y ello se debe en parte al loable trabajo actoral de la actriz que la encarna; sobre su supuesta carga excesiva de violencia en la adaptación para la TV, me sorprenden estos dichos, ya que su conducta responde a la verosimilitud de una mujer guerrera que en una cultura patriarcal debe defender su propia autenticidad y es en ello que radica gran parte de su heroísmo.
EliminarHola Elwin!
ResponderEliminar(mis comentarios estan llenos de spoilers, NO ME LEAN) XD
Pues que te puedo decir, bien ligth la temporada, mucho mas visual obviamente, aunque muy torpe en muchísimos sentidos.
Lastimosamente los buenos momentos se ven empañados por -tengo que decirlo-boludeses innecesarias, como La Montaña destripando gente (jajajajaja), Asha-Yara y su "estupendo" viaje, la violación del septo (estas son 50 sombras de Jaime, es un show Sado, tengo que llamar Maestro a alguien?), oh, y Sansa-Maléfica-eyeroll (porque un buen vestido refleja tu personalidad o cambio, o desarrollo, o...), y lo distorsionado del personaje de Shae (el colmo).
En contrapartida, me gustó lo de los bebes y el Rey Sombra. Jon no estuvo tan mal esta temporada, pasable. Adoré a Elí y Sam, la Boda Púrpura fue estupenda. Margy está teniendo un buen desarrollo, en contraste con el pobre Loras. Nada que decir de Stannis, Davos,Bolton, da gusto verlos aunque no hagan nada relevante.
La razón por la que continuo con la serie es porque amo el cast. Pero hay niveles y niveles de machismo y misoginia que puedo manejar.
Si es solo por entretenerme me quedo con cosas sencillas como Sleepy Hollow o Arrow. Si es por algo mas de sustancia voy a comenzar la segunda temporada de Peaky Bleanders...
Saludos ;)
¡Qué sorpresa volver a saber de ti por estos lares, Damablanca, y más considerando el largo tiempo desde tu último comentario acá! Pues una vez más me demuestras que eres toda una erudita en esta saga y que tu memoria es lejos mejor que la mía, pues yo olvido pronto tanto detalle que aquí mencionas (en ese sentido no sé si ello es bueno o malo para mí, porque a la larga cuando vuelvo a encontrarme con estas historias, las disfruto casi como si fuera la primera vez). Aún tengo pendiente leerme el último tomo publicado de la saga, el cual de seguro te lo conoces al revés y al derecho. Ojalá las siguientes temporadas no te decepcione tanto.
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