I. Antecedentes
para una nueva serie de culto.
En 1982 dos genios del terror unieron
sus talentos para darnos a sus seguidores y amantes del género lo que pronto se
transformaría en una película de culto: Creepshow. Me estoy refiriendo a una película dirigida
por toda una dupla de oro: George Romero, el mismo “padre de los zombies” que nos
había regalado ya hace rato su genial debut con La Noche de los Muertos Vivientes
y su secuela El Amanecer de los Muertos; y su
compañero a cargo del guión, Stephen King, por entonces también escritor
consagrado gracias a varias novelas suyas y de las cuales solo nombraré por
ahora Salem´s Lot.
Lo que hicieron a través de este trabajo sus
creadores, fue nada menos que realizar un cariñoso homenaje a los cómics de
terror, sangrientos y con algo de humor negro, de la desaparecida editorial EC,
de la cual ambos mamaron de niños y/o jóvenes por allá en la década de los
50. De este modo, armaron su obra como
si se tratara de diversas historias a manera de antología, tal como sucedía con
esas viejas publicaciones, utilizando además un personaje macabro a manera de
anfitrión y recreando el estilo de las viñetas en las que están divididas las
historietas.
5 fueron las historias que contaron en esta
ocasión Romero y King y para ello se valieron de numerosos actores, entre ellos
unos cuantos ya veteranos como Leslie Nielsen y E. G. Marshall, más varias
jóvenes promesas que con los años cobrarían incluso más renombre que los
anteriores, tales como Adrienne Barbeau, Ted Danson y en especial Ed Harris. Cabe mencionar que el propio Stephen King
actuó como protagonista del primer segmento.
Debido al éxito de esta producción, en 1987
se realizó una secuela, para nada mala, aunque de ella aparte de la historia
que une los tres segmentos que la componen, solo la segunda parte es en verdad
memorable; y es que esta, basada en el cuento La Balsa del “Tío Steve”,
por razones presupuestarias no pudo salir en su predecesora como se tenía
pensado originalmente, siendo lejos lo más inquietante de este filme. No obstante, esta vez Romero no estuvo detrás
de las cámaras y le pasó el mando a su amigo colaborador Michael Gornick,
mientras que él ofició de guionista junto al mismo King.
Cabe mencionar que en ambas películas
también participó otro grande del terror: el dibujante Berni Wrightson, otro
querido amigo de Romero y de King, realizando los diseños para las viñetas y
animaciones de estas, todo al muy viejo estilo de la adorada EC y las empresas
que siguieron su legado.
Por cierto, hay una Creepshow III de 2006,
pero este servidor no la ha visto y al parecer es olvidable. Está compuesta por 5 historias, si bien en
ellas no participaron de ninguna manera Romero, ni King.
Tráiler de Creepshow (1982).
El maestro de los efectos especiales y
maquillajes monstruosos, Greg Nicotero, hace rato ya director de cine y
productor detrás de cientos de títulos para el cine y la televisión se interesó
en este proyecto…Y es que este trabajó en su juventud para el propio Romero y
luego ya un veterano realizó los trucos para varias adaptaciones de la
narrativa de S.K (entre ellas de La Niebla).
Fue así que la serie imita o más bien sigue
los lineamientos de las películas en la que se inspira, contando dos historias por
episodio, de media hora cada segmento.
Varios autores fueron adaptados en esta ocasión, partiendo por el propio
Stephen King y terminando por Joe Hill, su igualmente famoso hijo mayor,
también autor multipremiado; por otro lado, también encontramos acá guiones
originales, algunos de la mano del propio Nicotero y otra de Paul Dini,
prestigioso escritor de cómics y cartoons, sin dejar de mencionar al veterano
escritor de cómics de terror Bruce Jones.
De igual manera grandes actores participaron en esta primera temporada,
de solo 6 episodios, algunos de ellos muy ligados al género y a los propios
artífices de ambas películas clásicas.
Para completar el tributo a las mencionadas
cintas y de las cuales recibe su nombre el show, crearon un nuevo anfitrión y
que en todo caso se parece bastante al de la primera película…Sin embargo, este
no resulta muy simpático que digamos e incluso se podría decir que se ve
intimidatorio, a diferencia de lo que dicta la tradición de los viejos cómics
en los que se inspira esta producción (si bien comparte su gusto por el humor
negro) y que pese a su monstruosidad son amables con su público. Además, se usaron efectos especiales “retro”
en muchos casos, optando por la animatrónica y los disfraces aparatosos en vez
del hoy abusado GGI, lo que para los nostálgicos de las obras del pasado
resulta memorable.
Por cierto, también se agradece que tenga
créditos de apertura, estos bastante efectivos y donde en ellos ahora sí dio
gusto el uso de la tecnología computacional.
De igual manera, al comienzo de las historias, entre medio y al final
del capítulo podemos ver páginas de la revista de la que se suponen vienen
estos relatos, sin dudas otro precioso detalle que honra los cómics que
originaron luego tales obras.
Créditos de apertura de la serie Creepshow.
III. Los episodios.
1. Materia
Gris/La Casa de la Cabeza.
Un programa como este y considerando sus
antecedentes, no podía dejar de adaptar al llamado Rey del Terror y qué no
mejor partiendo con una de sus historias clásicas. Es así que Materia Gris corresponde
a uno de sus primeros cuentos, de esos de “terror puro y duro” que publicaba en
su juventud en revistas antes de cobrar fama y fortuna. Este relato estaba pendiente desde hace
décadas, considerando que varios de los textos que lo acompañaron en El
Umbral de la Noche (por cierto, la vieja edición de bolsillo que tengo
regalada por mi madre cuando era adolescente, de la editorial Plaza y Janez,
lleva de portada una imagen de la peli original de Creepshow), su primera
colección de cuentos, ya habían tenido sus adaptaciones e incluso algunos más
de una y hasta fueron fuente de franquicias como Los Niños del Maíz o Camiones
(cuya primera versión la dirigió el propio King en los ochenta).
Esta pieza que recuerdo con cariño e
incluso se las di a leer a unos alumnos que me pidieron recomendaciones, trata
acerca de un hombre que para mitigar sus penas se dedica a tomar cerveza como
condenado. Su hijo adolescente está
sometido al vicio de su papá y un día le cuenta cómo llegó a todo esto a una
mujer, luego de que llega hasta ella y a sus compañeros para pedirle
ayuda. El título de la joyita tiene que
ver con lo que le pasa al alcohólico y cómo ello afecta a quienes lo rodean, de
una forma mucho más espantosa que en los dramas relacionados con las familias
disfuncionales típicas.
Detrás del guión en el cual nos
encontramos con atrocidades e imágenes en verdad espantosas y al final con un
verdadero monstruo memorable, bien podemos hallar una metáfora y una moraleja
relacionada con los efectos nocivos de las dependencias (que King muy bien lo
sabe, tal como él mismo nos lo ha contado sin tapujos en su hermoso libro Mientras
Escribo): a la larga, si no llegamos a controlar nuestro dolor y no
paramos el vicio que nos consume, ellos nos terminan por destruir.
Debo destacar la dirección de arte de esta
sección del capítulo, que en verdad nos hace creer que estamos en medio de una
tormenta (¿Se han dado cuenta de que al Tío Steve le encanta ambientar sus
narraciones en medio de tempestades de lluvia y nieve, en especial cuando se
llega al clímax, como una manera de representar a través de la madre naturaleza
el choque de las fuerzas en pugna?) y el hecho de que una de las protagonistas
es nada menos que Adrienne Barbeau, ahora una anciana y aun así activa y tan
carismática como siempre es un detalle a la primera película para el cine de
esta franquicia, puesto que en sus años
mozos participó en ella (si bien da penita verla tan viejita…¡Con lo sexy que
era!). Asimismo, actúa otro tremendo
artista, Tobin Bell, quien hizo del villano Jigsaw en esas perlas gores que son
los filmes de la saga Saw (y ahora no del malo de la historia)
y el moreno Giancarlo Esposito (al que en una semana he visto en tres papeles
diferentes y en verdad que actúa bien el veterano).
La segunda historia corresponde a La
Casa de la Cabeza, que en inglés viene a ser un juego de cabeza por el
típico nombre de relatos de horror: House of the Dead (muerte) por House
of the Head (cabeza). ¿Y por qué
ese nombre tan raro? Pues porque la trama gira en torno a una casa de muñecas y
a una cabeza que aparece de un momento a otro de manera inexplicable.
La protagonista es una niña de unos ¿7
años?, inteligente, sensible e independiente que le ha tomado el gusto a este
tipo de juguetes. Ha logrado tener una
familia “ideal”, con su perro guardián en uno de estos objetos muy
elaborado. Cuando todo parece que va
bien, un día descubre que a los “habitantes” de la casita se ha sumado una
horrorosa cabeza tipo zombie y la cual, por increíble que nos parezca, se ve
que aterroriza a los muñequitos. El tiempo
pasa y la chica ve cómo el intruso invade la tranquilidad, al punto que ella
por sí misma y sin contarle a sus padres, hará lo posible por salvar la
situación desde su ingenuidad infantil o más bien utilizando su “razonamiento
mágico”, al ser capaz de aceptar lo extraordinario sin problemas (a diferencia
de un adulto).
Entre lo maravilloso de esta segunda
historia, se encuentra la actuación de la pequeña actriz a cargo de la
protagonista, quien no solo realiza con increíble convicción su rol, sino que
además carga con el papel de una chica que nos deja con la boca abierta, por la
manera de cómo enfrenta ella sola un horror que muchos adultos maduros apenas
podrían superar. La ingeniosa manera
para abordar la contaminación del mal en lo cotidiano, todo sin violencia
explícita y a través de los ojos de una menor de edad, nos pone tensos y
esperando cualquier cosa del destino de la pequeña heroína.
La idea original de esta sección (quizás lo
más sobresaliente de toda la primera temporada), viene de un cuento de Josh
Malerman, un emergente escritor gringo que aparte de dedicarse a este noble
arte, es músico y con una carrera bastante exitosa en ello, por cierto. Ganador de varios premios gracias a su pluma,
su debut fue nada menos que con Bird Box (2014 y publicada en
nuestra lengua con el nombre A Ciegas); esta obra fue llevada al
cine gracias a Netflix y a la talentosa Sandra Bullock, que la produjo y se
reservó el papel principal para ello.
Malerman ha escrito a la fecha 6 novelas, como también ha incursionado
en el formato de la novela corta y de los cuentos, llegando a escribir un
montón de estos últimos en pocos años.
Para Creepshow él mismo se dio el gusto de adaptar su relato a la
pantalla chica.
Tráiler oficial.
2. Bad Wolf Down/The Finger.
Supongo que una
traducción correcta para la primera historia sería algo así como El
Lobo Malo Debajo (¿O escondido?) y es que se trata de un pieza acerca
de hombres lobos. Ambientada en plena
Segunda Guerra Mundial y cuando un pequeño grupo de soldados gringos apenas ha
logrado escapar con vida, de su enfrentamiento a los nazis, nos muestra a este
grupo que se encuentra con una mujer con esta maldición y la particular manera
que tienen de enfrentar dicho peligro.
Pero una cosa es la amenaza sobrenatural a la que están expuestas, donde
vemos que quienes sufren tal condición no han escogido convertirse en estos
monstruos y otra el mal que representa el enemigo, que si ha optado como
elección propia por este tipo de bestialidad.
Aparte de ser una historia típica de miedo
y monstruos, podemos hallar una honda reflexión acerca de la verdadera
naturaleza del ser humano, quien usa caretas y su supuesta urbanidad, para esconder sus conductas salvajes y toda la
oscuridad que puede llegar a albergar (que no solo vemos aquí bajo la imagen de
los nazis).
El papel del villano principal lo realiza
un actor de culto, gran veterano de filmes de terror y series de televisión del
género y de la ciencia ficción: uno de mis ídolos personales, Jeffrey Combs (Reanimator
y varios otros filmes de Stuart Gordon, por no mencionar sus papeles
recurrentes en Star Trek: Deep Space Nine y Star Trek: Enterprise).
The Finger (El Dedo) es la historia
de un hombre de vida más o menos miserable, que un día se encuentra en la calle
con un raro dedo y se lo lleva a su casa, para agregarlo a su colección de
cosas pilladas por cualquier parte. El
órgano comienza a crecer y termina por dar forma a un monstruito que demuestra
que le tiene aprecio. La trama se pone
en verdad truculenta, cuando la criatura encuentra una manera muy especial de
hacer feliz a su amo.
He aquí otra manera de abordar la
inclinación natural humana hacia el mal, en especial en lo que concierne al
egoísmo… ¡Y por supuesto que este monstruito (animado con animatrónica en la
más onda vintage) resulta ser una
proyección de los defectos del protagonista!
Esta segunda sección está protagonizada
por el simpático DJ Qualls, artista a quien no hace mucho este servidor vio
brillar en El Hombre en el Castillo.
El guión estuvo a cargo de otro verdadero
maestro del terror, David J. Schow, destacado guionista y escritor que estuvo
detrás de la recordada primera adaptación cinematográfica del cómic del
superhéroe El Cuervo y su trabajo para el guión de la muy entretenida
historia sobre psicópatas Pick me up de Larry Cohen para Maestros
del Horror; cabe destacar los formidables monólogos que escribió para
el protagonista, interpretados con mucha simpatía por Qualls, frente a la
cámara como hablándole al público. Asimismo, el propio Greg Nicotero ofició en
esta ocasión de director.
Tráiler N° 2.
Víspera de Todos
los Santos corresponde
al nombre en español de la primera parte de este capítulo, lo que entre los
gringos (y otras partes del mundo como incluso Chile, debido a la publicidad y
al impacto de la cultura popular, claro) también es conocido como… ¡Halloween!
Esta historia es protagonizada por un
grupo de niños que sale a realizar el tradicional “dulce o travesura” y el
verdadero sentido que le dan estos amigos a su viaje por el vecindario en el
que nacieron. La situación es rara,
porque en general se ven como un grupo amable entre gente que se quiere, pero
luego vemos que su presencia entre los vecinos es temida y la razón de ello
solo viene a revelarse con el impactante final.
Hay una atmósfera insana detrás de todo esto y ello en verdad nos mantiene
atentos en lo que vendría a ser, sin dudas, el segmento más emotivo de toda
esta breve y aun así inolvidable temporada debut.
El tema del dolor y el sentido que le
damos a este, juega un papel fundamental en esta ocasión, como algo que nos
puede destruir y también unir a otros.
Pero también volvemos a encontrarnos con las ideas de la justicia, el
castigo y la venganza, viejos temas que tantas narraciones clásicas de terror
han originado.
Otra vez estamos hablando de un guión
original, aunque esta vez quién está detrás de ello, viene a ser un escritor
por quien no puedo dejar de sentir enorme respeto: Bruce Jones ¿Y quién es este
señor? Pues estamos hablando de un veterano de los cómics y al que le debemos
una enorme cantidad de historias de terror hoy ya clásicas; todas hechas para
revistas tales como Eerie y Creepie, de la que salieran reales
obras maestras tales como esa joyita que es Jennifer, dibujada
bellamente por Berni Wrigtson y que gracias a la ya mencionada Maestros
del Horror y a Dario Argento, pudimos ver adaptada a la pantalla chica que
llega a dar gusto.
Traducido literalmente en nuestra lengua
como El
Hombre en el Maletero, la segunda parte es otra historia de terror
sobrenatural con mucho humor negro, tal como el caso de El Dedo que ya revisamos
más arriba. Esta vez se trata de un
hombre joven, al que supuestamente por error le llega una maleta que no es la
suya, la que trae un cargamento muy especial: un hombre que por increíble que
parezca, logra estar vivo dentro de ella, pese a lo retorcido que está; el
sujeto pide ayuda para salir de su confinamiento y cuando el protagonista está
a punto de ayudarlo, se da cuenta de que le conviene mantenerlo ahí, pues
gracias al dolor del hombre del maletero puede conseguir todo el dinero que
desea. Dos personas más se involucran en
esto, trayendo consecuencias nocivas para todos ellos.
Detrás de esta historia aparentemente
absurda y con momentos tanto graciosos, como con su cuota de violencia, estamos
frente a una de esas obras del género de gran carga moral. El exacerbado deseo humano por el dinero, aún
a costa de nuestra propia alma y del bienestar de otros, se encuentra presente
en este pequeño drama que, además, reinterpreta de manera muy original a uno de
los personajes habituales de la más rancia tradición sobrenatural y del género
de horror.
Elwin:
ResponderEliminarExcelente post, solo vi el primer episodio de la serie, pero ya mismo me pongo con el resto, que se ve excelente. Acompañan a tus palabras el éxito que tuvo, siendo la serie más vista de la cadena Shuidder, y ya habiendo sido renovada para una segunda temporada. Todo ha sido inmejorable... sobre todo en algo tan difícil como lo es traer un "terror de antes", manteniendo por completo la esencia. Es un soplo de aire fresco. Por cierto... como dato curioso, existió un proyecto de serie llamado Creepshow RAW del que solo se hizo un cortometraje, titulado INSOMNIA, y que está en You Tube. Es del año 2010.
Saludos
RICARDO
No tenía idea, amigo, de ese proyecto del que me cuentas ¿Y qué tal? Bueno, el echaré un vistazo. Ojalá pronto te veas la temporada completa, que te fascinará y también ojalá llegue la segunda, con más episodios y como mínimo manteniendo la misma calidad.
EliminarSaludos Elwin, aquí, murinus2009.
ResponderEliminarMuy buena Recuento de de ese gran clásico que fue Creepshow de 1982, te quedó muy bien, transmites el gusto al narrar la Obra
Felicitaciones!
Es la primera vez que veo una Reseña tan completa de aquella película no sabía que en ella participaron 2 grandes de la talla de George A. Romero y Stephen King.
Por cierto que tengo pendiente ver esa película.
De igual manera tengo pendiente ver las partes 2 de 1987 y la 3 de 2006.
Por cierto una pregunta
Creepshow tiene algo que ver con Tales From The Crypt? O son 2 obras distintas?
Lo pregunto porque por un momento pensé que eran la misma.
Y es que también tengo pendiente Tales From The Crypt, creo que sólo vi 2 escenas de 2 capítulos...
Regresando a Creepshow, me sorprendió que es una serie actual, pensé que narrabas algún producto noventera o de los tempranos 2000 pero por lo que entiendo es una serie actual.
Narras muy bien los episodios que integran esta temporada amigo, sobre todo aquel de la niña, que sola, debe hacer frente a esa cabeza zombie que aterroriza a su pequeña familia.
Apunto en los pendientes:
Creepshow I, II y III más:
Creepshow, la serie que reseñas aquí.
Te reitero Elwin, Muy buen Trabajo, te quedó muy bien, me gustó mucho.
A esperar nuevas Partes.
Nos vemos pronto.
Me alegra saber que te entusiasma lo que escribo y espero puedas disfrutar de los clásicos que menciono tanto como yo (que en especial adoro la primera peli); la tercera no la he visto, así que nada puedo decir de ella, pero no me enloquece verla.
EliminarEn cuanto a "Tales From the Crypt", tremenda serie, la única relación que tiene con Creepshow es que también homenajea esos viejos cómics, pero en este caso usando esas historias como base de sus episodios, o sea, sus guiones no son originales.
Nunca vi Creepshow (1982) pero si había escuchado de ella. Ahora, no tenía idea de que existía una serie basada en dicha película o antología. Me llama la atención lo que nos cuentas de sus primeros episodios, pero no mucho sobre el último, el de Halloween y el Hombre del Maletero.
ResponderEliminarPues te recomiendo enormemente las dos pelis originales, que las adoro y esta serie.
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